El ministro de Agricultura, Luis Planas, confiaba en días precedentes en alcanzar un acuerdo este miércoles con las comunidades autónomas para dar forma al Plan Estratégico Nacional, la herramienta que permitirá aplicar la nueva Política Agrícola Común en nuestro país después del pacto alcanzado a finales del mes pasado a nivel europeo. Pero no ha sido así. Gobierno central y autonomías están obligados a entenderse para diseñar una herramienta que permita distribuir los más de 47.000 millones que corresponden a España entre 2023 y 2027 y ese entendimiento ha de llegar antes de fin de año, fecha límite para presentar el Plan en Bruselas. Sin embargo, la primera reunión no ha dado los frutos deseados. Fuentes del sector hablan de desacuerdos y de opacidad por parte del Ejecutivo a la hora de explicar a los responsables regionales las estrategias y la manera de repartir el dinero.

Jesús Julio Carnero, consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León (único asistente a la reunión que se había pronunciado al cierre de estas páginas), ha avanzado que hasta «septiembre u octubre» no habrá acuerdo sobre la aplicación de los ecoesquemas, meses en los que se celebrará una nueva Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural donde debe llegar ese «gran acuerdo» entre las autonomías. Carnero, que ya anticipaba antes de la reunión que era «fundamental» conocer el desarrollo de los ecoesquemas antes de tomar una decisión «definitiva», ha anunciado que el próximo 21 de julio habrá nuevas reuniones técnicas en esta materia «tan importante, trascendente y troncal». A partir de estas reuniones, hacia el inicio del otoño se volverá a celebrar otra Conferencia Sectorial que Carnero confía en que sea «definitiva» no solo en la situación «conclusiva» de los ecoesquemas, sino también en el resto de cuestiones que conformen el Plan Estratégico Nacional.