Por tercer año consecutivo la Diputación de Ávila asumirá el coste del servicio del Organismo Autónomo de Recaudación (OAR) en lo que respecta, valga la redundancia, a la recaudación de las tasas e impuestos de los ayuntamientos, mancomunidades y comunidades de regantes que hayan delegado esta función en el OAR. Para ello se ha dotado de una partida presupuestaria de 2,2 millones, en tanto en cuanto el coste del año pasado fue de 2.135.000 euros y se esperan mover en números similares.

El organismo se encarga de recudar los impuestos y tasas que los ayuntamientos previamente hayan decidido delegar en un Pleno al efecto y, a día de hoy, son  242 de un total de 247 municipios (salvo El Tiemblo, Martiherrero, Casavieja, El Barco de Ávila y Gavilanes)de la provincia los que han dado el paso, explicaba el presidente de la Diputación. Por su parte, el responsable de Economía y Hacienda de la institución provincial, Juan Pablo Martín, aseguraba que desde que se implantó la medida ha habido «un efecto llamada».

En cualquier caso ponían en valor ambos lo que esto supone para los ayuntamientos que previamente a la medida tenían que abonar entre yun 4 y un 5% del importe que se recaudaba y que ahora no sólo no lo abonan sino que se les devuelve la parte correspondiente cada día 29 de mes para que lo inviertan en lo que estimen más oportuno.

Destacaban asímismo la eficacia y la eficiencia de una medida «pionera y puntera» que además en cierto modo marca el camino a seguir «a futuro por las diputaciones».

Tras el Plan Extraordinario de Inversiones dotado con 5,5 millones de euros es, aseguraban la partida más importante aunque los ayuntamientos no lo reciban de una manera directa sino indirecta. El importe es superior explicaba el presidente a el del Plan de Empleo Local o a las ayudas para gasto corriente. Además se cumple con el techo de gasto y así «podemos inyectar los fondos de una manera indirecta».

Alababan la toma de decisión que se plasmó en una propuesta del equipo de Gobierno que en los tres años que lleva de aplicación nunca ha tenido una enmienda de la oposición.

Defendían esa eficacia y eficiencia de la medida, la autonomía de los ayuntamientos a la hora de decidir si delegan o no y qué es lo que delegan, ejemplo de descentralización y de cesión de fondos incondicionados.

Durante el año pasado el OAR recaudó al respecto más de 43 millones de euros. En este sentido y también cómo ejemplo del dinero que llega a los municipios Sánchez Cabrera hacía un repaso por ellos, Arévalo aseguraba recaudó en tasas e impuestos a través del OAR 1,4 millones y no tuvo que pagar por el servicio 159.783;La Adrada casi 1,2 millones recaudados y se ahorró por el servicio del OAR más de 56.400 euros que toda vez ingresado los pudo invertir en lo que quisiera; Arenas casi dos millones recaudados y 94.136 para invertir.

En definitiva, Martín entendía que delegar en el OAR es «estar en buenas manos», una afirmación que hacía como alcalde que es de Sotillo de la Adrada. 

Y es que quiso el presidente hacer una valoración muy positiva del trabajo del OAR pero además avalada por «todos los indicadores». Es, resumió «un servicio puntero, eficaz y desarrollado con eficiencia». Además los abulenses, relataba Martín, «son cumplidores», es decir el porcentaje de ciudadanos que paga en el periodo voluntario sus impuestos y tributos ronda «el 92%». Pues bien para todos esos ciudadanos aseguraba que parte de esa inversión retorna a su municipio (la que respecta al pago por el servicio del OAR) 

La conclusión es que aunque debe aprobarse año a año «la medida ha llegado para quedarse».

La Diputación para el servicio (esos 2,2 millones presupuestados este año) del que se encargan tres empleados aunque hay además una empresa contratada a mayores que es GTTcuyo coste también asume la insitución provincialI.