Estamos a mitad de año, mediado junio y el calor hace ya unos días que se ha hecho presente anunciando el verano. Un verano que para la sierra de Gredos significa el regreso de su ganado trashumante que volverá a los pastos de los que partieron con el invierno, a esos agostaderos en tierras altas que los esperan como agua de mayo.

El camino para las reses trashumantes y sus propietarios ya se ha iniciado y desde la IGP Carne de Ávila y la Asociación de raza Ávileña-Negra-Ibérica van a dar buena cuenta de ese día a día de las vacadas que han decidido emprender el trayecto a pie. Lo harán a través de redes sociales en las que van a transmitir alguno de los momentos clave del camino, de las actividades diarias de los ganaderos y aportando información sobre la actividad en sí misma. Se trata de mantener el espíritu y las ganas de seguir de quienes se dedican a ello y más siendo una actividad tan tradicional y arraigada en nuestra cultura.

Serán, tal y como especifican en nota de prensa, alrededor de 2.500/3.000 las cabezas que regresen andando. Una tarea en la que suelen invertir alrededor de dos semanas ya que lo normal es recorrer unos 20/25 kilómetros diarios y el trayecto se extiende por unos 250 ya que vienen procedentes de Castilla La Mancha y Extremadura en su inmensa mayoría.

Las reses trashumantes inician el camino de vuelta a GredosUn caminar que es un espectáculo en sí mismo y por eso quieren dar buena cuenta de ello, además de que hablamos de una actividad que lleva ya varios años luciendo el sello de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por lo mucho que aporta  al mundo rural en general. Hablamos de que esta actividad ayuda a mantener a la población en los pueblos y con ella se favorece a la zona desde el punto de vista económico (es arrendamiento de pastos, de inversión en transportes, productores de piensos, veterinarios), sin olvidar la repercusión cultural y medioambiental (ya que las reses ayudan pastanto a mantener en condiciones la zona y evitan incendios al hacer desaparecer material que podría ser ‘pasto’ de las llamas.

A día de hoy hablamos en Ávila de cerca de 20.000 reses trashumantes en manos de unos 450 propietarios, una cifra que se mantiene en los últimos años pero que dista mucho de las 35.000 que había en el año 2010, de ahí la importancia de su preservación.

Concurso fotográfico. Desde hace unos años, trece con éste,  en torno a este regreso se viene organizando un concurso fotográfico con el que ensalzar esta actividad y este año de nuevo regresa para repartir dos premios uno valorado en 500 euros y otro en 300 tanto en material de fotografía o trashumancia o a través de una colección de libros.

Se trata de captar algún instante significativo de ese camino de vuelta a Ávila entre los días 15 y 30 de junio. El plazo máximo para la presentación de fotografías será el 1 de julio y los ganadores se conocerán el día 7, aunque no será hasta la feria de septiembre que se celebre en la capital abulense cuando se entreguen.

Quien quiera puede participar con un máximo de 12 fotografías entre 1 y 3 megas de tamaño y en formato jpg. Pueden ser color o blanco y negro y enviarlas a concurso@carnedeavila.org

Se tendrá que autorizar el uso de las imágenes para las actividades de promoción de la actividad, ya que podrán ser incluidas en la ‘Exposición Itinerante Trashumancia Viva’.