El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha admitido que el impacto económico que provocará la declaración del estado de alarma por la crisis del coronavirus será "grande" y que "mucha gente va a verse damnificada", pero ha sostenido que hay que "defender lo más importante, que es la salud pública".

Sánchez ha declinado ofrecer una estimación de dicho impacto en su comparecencia para explicar el real decreto que declara el estado de alarma, con la justificación de que el escenario es "muy cambiante".

"Las medidas que vamos a adoptar son drásticas y van a tener desgraciadamente consecuencias", ha dicho Sánchez, que ha avanzado que el Gobierno también ha acordado hoy implementar en el próximo Consejo de Ministros un nuevo paquete de medidas económicas para paliar los efectos económicos y sociales del estado de alarma.

El presidente se ha dirigido a trabajadores autónomos, pymes (pequeñas y medianas empresas) y empresarios, y se ha comprometido a hacer todo lo que esté en su mano "para amortiguar" esos efectos y a dar respuesta a "muchas de las realidades que van a surgir por el estado de alarma".

Entre las medidas que se aprueben, que serán de cuatro tipos, figuran las de apoyo a trabajadores, autónomos, empresarios, familias y colectivos más vulnerables y un segundo grupo para respaldar la flexibilización de los mecanismos de ajuste temporal de actividad para evitar los despidos, los denominados ERTEs.

También ha mencionado un tercer grupo de medidas para apoyar la actividad económica y a las empresas, así como para garantizar la liquidez ante las dificultades "transitorias pero intensas" consecuencia de la emergencia económica derivada del coronavirus.

Por último se ha referido al apoyo a la investigación de la vacuna sobre el Covid-19.

Ha explicado que estas medidas "se van a unir a otras nuevas" que irán aprobando y a las ya activas del plan de choque económico que presentó y aprobó el Ejecutivo.