La diputada de Vox Rocío de Meer resultó herida ayer al recibir una pedrada momentos antes del mitin que el presidente de Vox, Santiago Abascal, tenía previsto ofrecer en la localidad vizcaína de Sestao, donde los efectivos de la Ertzaintza cargaron contra cientos de manifestantes, antifascistas y radicales, que intentaron boicotear el acto. La diputada sufrió una brecha en una ceja cuando los congregados procedieron a arrojar botes de humo, botellas, piedras, huevos y otros objetos desde las calles adyacentes al interior de la plaza, donde estaban los asistentes al mitin, así como los periodistas.

Abascal denunció la agresión y acusó al PNV de haber permitido este «acto de hostigamiento mafioso y proterrorista» al no haber impedido la «manifestación ilegal» durante la que los responsables de Vox fueron amenazados de muerte y agredidos con piedras.

«Podría haber habido alguna desgracia», lamentó el líder de Vox, que avanzó que actuarán contra el jefe del dispositivo de la Ertzaintza que no disolvió el acto y contra la consejera vasca de Interior, Estefanía Beltrán de Heredia.

«Este no es un acto de provocación sino un acto legítimo para representar los derechos políticos de quienes viven en Sestao y nos han apoyado y eso vamos a demostrarlo todos los días. Allí donde haya un vasco que haya confiado en Vox, allí vamos a estar para decirle que no está solo y que le representamos», incidió el presidente de la formación conservadora.

«Le han partido una ceja a una Diputada del Vox de una pedrada. Después de una hora la plaza sigue asediada y no hay dispositivo de seguridad que nos permita salir. ¿Derechos y libertades? No para todos en España», denunció por su parte Macarena Olona.