Una curiosa y hoy sabrosa fiesta que se remonta, según la historia, a 1751 momento en el que se funda la mencionada Cofradía y cuya principal función era enterrar y dar de comer a los pobres el 3 de mayo, en esas épocas de escasez.
Aunque por esa época y fecha en diferentes localidades debieron ser numerosas las cofradías fundadas con el mismo fin, Chamartín debió destacar, entre otras porque aquí llegaban en tiempos pasados muchos serranos de diferentes lugares para saborear la merienda que daban los vecinos del pueblo sin coste alguno a los visitantes ya que los gastos eran asumidos desde la cofradía de la Vera Cruz.
Esta venerable tradición de más de 250 años se ha seguido manteniendo y ‘el día del pan y el queso’ tuvo lugar una ‘atípica’ celebración en la iglesia del pueblo. Al finalizar la misma, en el salón del Ayuntamiento se siguió con la mencionada tradición y tuvo lugar el ya famoso reparto de las raciones del queso y del pan a las que los miembros de la Cofradía chamartina siguen invitando con la misma generosidad de antaño. Tras la bendición por parte del sacerdote que presidió la misa y el corte y colocado de las viandas, los asistentes saborearon la merienda continuando, un año más esta sabrosa tradición.