En Castilla-La Mancha se pueden disfrutar algunos de los productos agroalimentarios más exclusivos de toda España. Desde una gran variedad de vinos hasta el mundialmente famoso queso manchego, pasando por el oro rojo (azafrán), excelentes aceites de oliva, jamones, ajos de Las Pedroñeras o carnes de caza, entre otros muchos. Denominaciones de origen (DOP), indicaciones geográficas protegidas (IGP), especialidades tradicionales garantizadas (ETG), producciones ecológicas o marcas de calidad dan cobertura a todas estas delicias cuyos productores tratan de superarse continuamente.
El Gobierno de esta comunidad autónoma lo sabe y por eso, cada año, otorga los Premios Gran Selección con la clara intención de incentivar a quienes trabajan día tras día para hacer llegar la excelencia a la mesa del consumidor.
La edición de este año, la trigésimo primera, tuvo lugar el pasado viernes y ha estado marcada como, casi todo últimamente, por la pandemia. El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo rural, Francisco Martínez Arroyo, se lamentaba de la imposibilidad de celebrar una gala presencial como en otras ocasiones, ya que las ceremonias de entrega «siempre benefician al municipio donde se realizan y permiten destacar cada año una denominación».
Estos galardones, «cada vez más consolidados», han sido seleccionados a partir de 538 muestras, cantidad ligeramente inferior a la del año anterior: «Las muestras de vino se han reducido, pero, sin embargo, han aumentado las de queso, hasta alcanzar la cifra de 72». Sus evaluadores fueron 110 catadores especializados (entre ellos, medio centenar específicamente dedicados al vino) que realizaron su elección entre los meses de mayo y junio.
Este ha sido el tercer año consecutivo que los Gran Selección han incluido un premio a la Mejor Industria de Producción Ecológica, que en esta ocasión cayó en manos de la Sociedad Agraria de Transformación Ecopistacho, de Alcázar de San Juan (Ciudad Real). El consejero, que calificó a este fruto como «muy característico de Castilla-La Mancha» por su auge y por su modelo de producción ecológica, aprovechó para recordar «el gran esfuerzo que desde esta región se ha hecho a lo largo de los últimos años para fomentarlo». En relación a este premio, Martínez Arroyo quiso recalcar el «esfuerzo» del Gobierno de Castilla-La Mancha con este modelo de producción y destacó que, escasos días antes de la entrega de premios, alrededor de un millar de agricultores ecológicos recibieron 3,7 millones de euros en ayudas que vienen a completar los pagos del Fondo Europeo Agrícola de Garantía (FEAGA), que han supuesto un total de más de 35 millones.
Martínez Arroyo avanzó que para el año que viene está pensado crear una nueva categoría que recompense a la mejor empresa de venta directa de la región. A este respecto, anunció que «estamos a punto de aprobar en Consejo de Gobierno, en apenas 10 días, un decreto que impulsará la venta directa de productos agrícolas, ganaderos y agroindustriales en las explotaciones de nuestros agricultores y ganaderos». Está iniciativa se verá apoyada por la creación de la herramienta Market Play, destinada a facilitar este tipo de transacciones.