El Ministerio de Cultura y Deporte, a través del Organismo Autónomo Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de Cultura, anunció que se ha encargado a la empresa pública Tragsa la ejecución de las obras de adecuación del palacio de Los Águila para ser sede del Museo del Prado y acoger también el Museo de Ávila.

Estas obras tienen un presupuesto total de 6.124.131,87 euros y una duración de 24 meses, con unos trabajos que comenzarán antes de que finalice el año, según adelantó el subdelegado del Gobierno, Arturo Barral. Esto es posible una vez que se han recibido todos los informes favorables para el inicio de las obras.

Mediante este encargo, el Ministerio de Cultura y Deporte reanuda el proyecto de rehabilitación del edificio histórico y su ampliación, legada en los años 80 a la Administración General del Estado por la duquesa de Valencia, con la condición de que en la misma se instalase un museo, aunque los primeros pasos que se dieron fue a finales de los 90 con el convenio que suscribía el palacio abulense al Museo del Prado. A partir de ese momento han sido diferentes las ideas y proyectos en los que se ha trabajado, con cambios de uso, hasta llegar al actual que, con un acuerdo con la Junta de Castilla y León, combina una ‘Sala Prado’ con ser la nueva sede del Museo de Ávila. Esto supone, si esta vez se materializa el proyecto, dejar atrás más de 20 años en los que se cambiaba la concepción de lo que se quería hacer con este espacio y las diferentes empresas que fueron abandonando el proyecto.

De esta forma, el palacio tendrá, cuando finalicen los trabajos y la dotación, la ‘Sala Prado’, como espacio permanente que albergará exposiciones temporales creadas específicamente para esta sede y con temáticas relevantes, a la vez que el Museo del Prado realizará depósitos que completen la colección permanente. Esta sala se ubicará en un edificio nuevo y sus anejos, con un espacio de más de 300 metros cuadrados, mientras que la parte del Museo de Ávila se ubicará en el propio palacio.

Por otra parte, el Ministerio de Cultura prevé iniciar en breve la tramitación de una segunda fase de actuaciones que comprenderán nuevas excavaciones arqueológicas, la musealización de los restos arqueológicos ya encontrados y de aquellos que pudieran descubrirse, la rehabilitación de las caballerizas y el ajardinamiento del resto de la parcela. Este avance en la segunda parte del proyecto se dio a conocer a principios de este mismo año cuando el propio Ministerio confirmó que se estaban haciendo algunos trabajos de mantenimiento, con desbroces, mientras se trabajaba en esa parte arqueológica y de rehabilitación de las caballerizas.

Eso supone un complemento al proyecto que se va a ejecutar y que fue el que se presentó en Ávila en marzo de 2018, si no hay nuevas modificaciones en la idea que adaptó el arquitecto Pedro Feduchi.

De lo que se habló en ese momento era de convertir el palacio de Los Águila en un referente cultural ya que quien acudiera tendría la posibilidad, en su visita, de ver las exposiciones que en su momento haya en la Sala Prado y también acercarse a los fondos del Museo de Ávila, ahora mismo dispersos. 

El proyecto supone contar con casi 6.000 metros útiles de superficie del palacio y tendrá también con una nueva zona constructiva, que será precisamente donde estará la sala de exposiciones del Museo del Prado, con 300 metros cuadrados para exposiciones comisariadas de larga duración y fondos del museo.

En la parte del Museo de Ávila está previsto una parte de exposición permanente de 730 metros cuadrados y habrá una zona de exposiciones temporales de más de cien. Se incluye también taller de restauración, aula didáctica, salón de actos y almacén de bienes culturales.

En este proyecto el acceso se producirá desde el jardín, que está previsto que sea un espacio abierto a la ciudad, permitiendo además el funcionamiento autónomo de las salas de exposiciones y talleres didácticos. De esta forma, el edificio histórico se dedicará a área de acogida, salas de exposición permanente del Museo de Ávila, salón de actos, biblioteca y usos administrativos.

En cuanto al edificio de nueva planta, allí estará el taller de restauración y uno de los principales atractivos, la ‘Sala Prado’. Será un espacio de doble altura, previsto para acoger obras de grandes dimensiones. Tendrá tres espacios, uno lineal, la sala central y una parte para piezas especiales con las que se quiera complementar. El edificio histórico y el de nueva planta estarán comunicados por un pasillo acristalado que facilitará el paso.