Llevan meses en total silencio, añorando las fotos y las carreras a su alrededor, aguardando el regreso de los visitantes, pero los Toros de Guisando acaban de recibir una buena noticia.
El monumento volverá a recibir visitantes a partir del próximo 1 de abril, coincidiendo con la celebración del Jueves Santo.
Desde ese día, la Venta Juradera, escenario de uno de los episodios trascendentales de la Historia de España, abrirá de nuevo sus puertas al turismo después del cierre obligado a causa de la pandemia.
Y lo hará con su horario y circunstancias habituales. Así, el monumento abrirá todos los viernes (sólo en horario de tarde), sábados, domingos y festivos del año, además de los tres primeros miércoles de cada mes.
En estos primeros compases de su regreso, la apertura se llevará a cabo con el horario de invierno: desde las 10,00 hasta las 14,00 horas y desde las 15,00 hasta las 18,00 horas.
Tras el 14 de abril entrará en vigor el horario de verano, que prolonga la apertura vespertina hasta las 21,00 horas.
Conviene recordar que el precio de la entrada es de dos euros por persona, y que esta incluye un librito de ocho páginas con información básica del monumento. Además, los menores de 14 años, pueden acceder gratuitamente al monumento, siempre acompañados de al menos una persona mayor de edad. Dentro de esta serie de cuestiones prácticas relativas a los Toros de Guisando, hay que tener en cuenta también que pese a ser un monumento de titularidad privada, al estar considerado BIC ofrece un día de visita gratuita, en su caso el primer viernes de cada mes así cómo los tres primeros miércoles de cada mes.
Y el que también abrirá sus puertas al público el 1 de abril es el vecino Monasterio de San Jerónimo de Guisando.
En este caso, sus visitas están sujetas a la disponibilidad de los guías, por lo que conviene consultar la página web del monumento para saber cuándo se puede disfrutar del mismo.
De momento, los responsables de esta joya de la provincia han abierto grupos los días 1, 2, 3, 10, 17 y 24 de abril.
Un monumento, por cierto, que dentro de poco tiempo verá mejorada su imagen.
Tal y como informaba Diario de Ávila hace apenas unas semanas, su propietario, Julián Juste, ha emprendido ya los pasos necesarios para llevar a cabo la reforma de consolidación y embellecimiento del monumento.
Este mismo miércoles confirmaba a este diario que «entre esta semana y la que viene» entregarán el proyecto definitivo. Después, será la Comisión de Patrimonio la que dé el visto bueno a unos trabajos que, espera, puedan arrancar el próximo mes de junio.
la casa de legos. Las obras se centrarán en buena medida en el tejado de la Casa de Legos. Serán trabajos vistosos pero, sobre todo, efectivos a la hora de conservar y consolidar la construcción de más antigüedad del conjunto de las ruinas.
El proyecto incluye también un capítulo esencial: la intervención en la fachada Este del claustro principal del monasterio.
En este caso, el paso de los años hizo que se perdiera el forjado del suelo por lo que habría que actuar en el mismo así como arriostrar toda la fachada para sujetarla y reforzarla.