El viceconsejero de Empleo y Diálogo Social de Castilla y León, el abulense David Martín, seguía en su cargo 24 horas después de la petición de inmediata dimisión formulada por el presidente de CEOE Ávila (antes Confae), Juan Saborido, por la gestión de la subvención de medio millón de euros a Avilagro para poner en marcha la plataforma agroalimentaria del Plan Territorial de Fomento de Ávila. Una petición de dimisión que el aludido se toma como «una anécdota», dado que a su juicio lo importante es que se retome el consenso en este eje del plan. Para ello, anuncia que ayer mismo se convocó una reunión del grupo de trabajo de la plataforma agroalimentaria para el próximo miércoles, 10 de marzo, cita a la que espera asistan los agentes del Diálogo Social que han sido tan críticos con esta ayuda, no en vano «son parte importante y fundamental» del citado grupo.

En este sentido, el viceconsejero de empleo volvió a defender la subvención a Avilagro pero aclaró que él no participó en su concesión, la cual «se aprobó en el Consejo de Gobierno de la Junta a propuesta de la Dirección General de Comercio, que no depende de la Viceconsejería de Empleo», dijo. Además, aseguró que el recurso de reposición interpuesto «se resolverá».

En cualquier caso, aseguró que la ayuda «es para Ávila, para el plan y para la plataforma agroalimentaria y existe una garantía total en el control de la gestión de esos fondos». De esta manera, continuó,«Avilagro solo es el contenedor de la subvención al liderar el proyecto junto a Ávila Auténtica», pero «tal y como dijo en su día el vicepresidente no se gastará ni un euro sin el acuerdo del grupo de trabajo». «Eso sí, una vez que se pongan en la mesa las fases y las decisiones, cada miembro de ese grupo deberá explicar las razones de su proceder respecto a su posición», añadió Martín, para a continuación mostrarse convencido de que «se va a poder llegar acuerdos porque, tal y como dijeron los miembros del Diálogo Social, el único objetivo es que el plan siga adelante». 

Respecto a su situación personal en esta polémica, el viceconsejero de Empleo reconoció que «yo facturé como abogado para Addit, una de las 60 empresas de Avilagro, y nunca he ocultado mi relación con ella. Que Saborido tenga que recurrir a mi anterior vida profesional lo dice todo, que por suerte la tengo y volveré a ella cuando lo diga la ciudadanía o el presidente de la Junta, pero no Saborido», señaló. «Que Saborido pida dimisión es que algo estoy haciendo bien, yo estoy trabajando por el futuro de los abulenses y lo seguiré haciendo pese a quien le pese», remarcó.