Quince jóvenes abulenses de 18 años han sido confinados en una casa rural de Navaluenga en la que estaban pasando unos días. Uno de los jóvenes se encontró mal, con fiebre y diarrea, por lo que los amigos optaron por llamar a emergencias 112. Fue trasladado al centro de Salud de Burgohondo, donde se le practicó la prueba del  PCR para detectar si es positivo en COVID-19. Devolviéndolo a la casa rural en la que se encontraba con sus amigos, a los que también se les ha practicado la misma prueba diagnostica. Mientras esperaban el resultado de las 18 pruebas los jóvenes estaban a las 22 horas de este viernes confinados en dicha casa rural, y se les ha aconsejado no abandonar la misma. Estos extremos fueron confirmados por la subdelegación de Gobierno a última hora de ayer, que indicó que los jóvenes permanecen en la vivienda mientras no se conozcan los resultados de las pruebas que se les han practicado. Los jóvenes tenían que haber salido de la vivienda el pasado jueves. Uno de los padres de estos jóvenes, con el que este periódico pudo hablar, mostró su malestar por el procedimiento que se ha llevado a cabo, puesto que, según dijo, a las nueve de la noche de ayer no les había llegado ninguna orden del confinamiento por parte de ninguna autoridad competente.