Salvo para recuperar lesionados, los parones en la competición no suelen llegar en buen momento para nadie. Perder ritmo nunca es una buena noticia, ni en lo colectivo ni en lo personal. Buen ejemplo de ello es Rafa Bethencourt. El gran canario cerraba el año con una de sus mejores actuaciones ante el Marin Peixegalego cuando las vacaciones llamaron a su puerta. Ahora vuele a las pistas con el objetivo «de seguir igual», en un proceso ascendente «en el que lo importante es ayudar al equipo». Un vestuario que volvía al trabajo con una semana de carga física.  «Nos hemos esforzado bastante, pero es cierto que tras parones como éstos se notan imprecisiones en el juego, fallos, te falta tacto, pero poco a poco se vuelve a recuperar el tono» señala Rafael Bethencourt ante un duelo que califica de «engañoso» porque «hasta ahora ellos han tenido muchas bajas, pero son mejor equipo de lo que refleja la clasificación».

«Vamos a ver cómo nos viene el parón, porque a veces cuesta entrar en ritmo» reconocía David Mangas, técnico del Grupo Eulen Carrefour El Bulevar. Por lo pronto el técnico abulense reconoce que los jugadores regresaron tras las vacaciones «bien». La báscula no dio sorpresas desagradables, lo cual es un buen paso para «recuperar las sensaciones con las que nos fuimos».