El presidente Alfonso Fernández Mañueco aseguró ayer que Castilla y León va a estar «a la altura» y que la Junta liderará el periodo tras la caída del estado de alarma «con iniciativa y anticipación». Sin embargo, apeló también a la responsabilidad individual de los ciudadanos para afrontar esta etapa porque recordó que el virus «sigue entre nosotros» y por lo tanto llamó a «no bajar la guardia».

En una declaración institucional tras acabar el estado de alarma, Mañueco animó a los ciudadanos a seguir siendo «prudentes» para reducir riesgos y aumentar la seguridad durante esta ‘nueva normalidad’. Recordó el «sufrimiento» que ha provocado el virus entre quienes han perdido seres queridos pero también «de todas las personas» al poner «a prueba» los sistemas de salud y de protección social que consideró que «han estado a la altura».

El presidente incidió en el liderazgo de la Junta en este proceso y explicó la puesta en marcha de un plan de transición a la normalidad para garantizar la seguridad sanitaria y contribuir así «a la recuperación económica y social», declaró. Igualmente aseguró que el sistema de salud de Castilla y León está «preparado para responder en hospitales, centros de salud y consultorios locales» para lo que incidió en que seguirá siendo esencial «mantener el control y la vigilancia del virus» y un protocolo de rastreo que permita «actuar rápidamente».

De la misma forma puso en valor la «unidad» reinante en Castilla y León como quedó plasmado en el pacto suscrito para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social, que servirá para «avanzar con la fuerza, la certeza, la confianza, el optimismo, la estabilidad y la esperanza que nos da la concordia».

Mañueco recordó que se trata de un acuerdo político pero «abierto a toda la sociedad para enriquecerlo» y que constituye en sí mismo «un ejemplo para el conjunto de España, un impulso al futuro basado en el diálogo y en el entendimiento frente a la confrontación estéril». Este acuerdo trazará el camino hacia la recuperación pero también «hacia la sostenibilidad, la modernización, la transformación digital y la calidad de los servicios públicos».

En su declaración institucional, el presidente tuvo unas palabras de recuerdo para las miles de personas afectadas en sus empleos, sus negocios y sus proyectos de vida, por lo que ayudarlas a salir adelante es «la gran prioridad» de la Junta a través de una recuperación «justa, cohesionada y equilibrada» en la Comunidad. Sin embargo, afirmó que el rasgo básico de la nueva etapa no debe ser «una mayor relajación», sino «una mayor conciencia», por lo que hizo un llamamiento a la responsabilidad individual y colectiva de la sociedad, según informa Ical.

Por último, Mañueco agradeció la colaboración y la solidaridad de las instituciones, entidades locales, tejido empresarial, sindicatos y la sociedad civil durante los más de tres meses del estado de alarma.