En el Adolfo Suárez los números sonríen a los encarnados

A.S.G.
-

Si en El Mancho es la Cebrereña la dominadora del derbi, en el Adolfo Suárez es el Real Ávila el que manda. El factor campo, clave en estos partidos

En el Adolfo Suárez los números sonríen a los encarnados

Suele sufrir el Real Ávila en El Mancho Ángel Sastre y se siente mucho más seguro en el Adolfo Suárez. Lo dicen los números de un derbi que vivía su último enfrentamiento precisamente en terreno de juego encarnado un 31 de marzo de 2019. Entonces, como ahora, con dos equipos con intereses bien distintos. El Real Ávila por dar caza, a la desesperada, a un Numancia B, cuarto, que les aventajaba en siete puntos. Los verdiblancos, penúltimos, por evitar un descenso que no lograrían esquivar. Sobre el césped, un 2-1 final. Se llevaba el derbi el Real Ávila, que volvía a desequilibrar las cuentas. Siete victorias para los encarnados, seis para los culturalistas y tres empates. Jonathan Prado devolvía el triunfo al bando encarnado, que no lo conseguía curiosamente desde la primera de las temporadas de José Manuel Jimeno.    

Ganaban de nuevo en el Adolfo Suárez, un territorio que fue monopolio de los encarnados pero que llegaron a perder. No fue hasta la 2014-15 cuando la Cebrereña conseguía ganar en el Adolfo Suárez (0-1).Hasta ese momento tres triunfos (2005-06,  2008-09 y la 2013-14) y un empate (2010-11) a favor del Real Ávila ante una Cebrereña que sufría horrores en campo encarnado. A partir de entonces ya no, aunque el balance siguiera subiendo a favor de los locales. Dos nuevas victorias (2016-17 y  2018-19) y un empate (2017-18) para seguir demostrando que en este tipo de partidos el campo es, sin lugar a dudas, un factor diferencial.