El vencejo común, Ave del Año 2021, fue el gran protagonista de las actividades organizadas por el Ayuntamiento de Ávila con motivo del Día del Medio Ambiente en el Paseo del Rastro. Sin duda, una de las especies más representativas de la ciudad, por la abundante población que alberga y también por el espectáculo que brinda con su comportamiento durante los meses en los que los abulenses pueden disfrutar de su presencia.

Y es que el vencejo común y otras especies de su mismo género (vencejo pálido, vencejo real, vencejo unicolor) crían en huecos y grietas de edificios que, en la mayoría de las ocasiones, quedan tapados cuando se acometen obras de rehabilitación o simplemente desaparecen cuando se derriban edificios antiguos.

Los vencejos regresan cada año a los mismos lugares para criar, tras un viaje desde África de miles de kilómetros sorteando todo tipo de peligros, y en el caso de Ávila su llegada se produce a mediados de abril y permanecen aquí hasta agosto. La desaparición de sus nidos hace disminuir su productividad, o les impide criar durante unos años, hasta que encuentran de nuevo los cada vez más escasos huecos en las ciudades.

Este viernes por la tarde se colocó un punto de observación en el Rastro, frente al lienzo sur de la Muralla, para contemplar el comportamiento de esta ave, de la mano de los guías Nacho Sevilla y Felipe Nebreda y con el apoyo de telescopios y prismáticos.

De la misma forma, se habilitó una zona de talleres de manualidades donde los niños podían crear imanes, caretas y chapas de vencejos. Eso sí, aunque la participación era libre, se estableció un control de aforo para garantizar el distanciamiento entre las personas.

Allí se dio cita, en representación del Ayuntamiento, la concejala de Medio Ambiente, Julia Martín, quien explicó que «el vencejo es una de las aves más significativas de Ávila, con colonias muy grandes en el Paseo del Rastro, y nos parecía bonito traerles aquí para contemplarlos, pues para nosotros es importante que los abulenses se acerquen a los entornos naturales y que pongan en valor el patrimonio biológico que tenemos en nuestro término municipal». También subrayó la necesidad de «inculcar a los más pequeños la cultura del cuidado del medio ambiente».

Por su parte, Nacho Sevilla señaló que «estamos para homenajear al medio ambiente, simbolizado en la figura del vencejo, que es un emblema de la capital y de las aves que están pasándolo mal, pues están pasando declives por nuestra forma de vida, de hacer los edificios y de utilizar pesticidas y otros productos que disminuyen las poblaciones de insectos, que son su comida principal».