Castilla y León registró dos víctimas mortales por ahogamiento durante los dos primeros meses del año y suma más de cien muertes por este motivo desde 2015, año en el que la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo comenzó a realizar el Informe Nacional de Ahogamientos.

Las dos muertes contabilizadas este año se produjeron en ríos, en ambos casos mayores de 70 años, dato que confirma que son los espacios acuáticos donde más fallecimientos por esta causa se han producido y representan el 65,3 por ciento de todos los casos computados en la Comunidad desde el año 2015.

El río Tormes, en Salamanca, y el río Bernesga, en León, han sido los lugares donde se han producido los primeros fallecimientos del año, zonas que ya se han cobrado la vida por ahogamiento de otras 12 personas desde que se inició este informe. 

En el conjunto del territorio nacional 31 personas han muerto por ahogamiento en los espacios acuáticos en los dos primeros meses del año, dato que indica un incremento respecto al mismo periodo del año anterior.