La vicesecretaria general del PSOE de Castilla y León, Virginia Barcones, lanzó ayer duras críticas al acuerdo firmado entre PP y Cs para la gobernabilidad de Castilla y León, que se desglosa en 100 medidas, por tener como única «ambición» el «reparto de sillones» y carece de un proyecto autónomo para la Comunidad. La dirigente socialista llegó a decir que es «un insulto a la inteligencia de los ciudadanos» y consideró que Toni Roldán, que abandonó ayer Ciudadanos por su «giro a la derecha», marcaba el «camino» a Francisco Igea en la Comunidad.

«Lo firmado vale tanto como un billete de monopoly», rebatió la número dos autonómica, que no otorgó «credibilidad» ni al acuerdo ni a quienes le firmaron porque «venían a regenerar pero han elegido el Gobierno de la degeneración, que ha manchado las instituciones con la corrupción».

Barcones se detuvo en la limitación de mandatos que propone Cs para recordar que Fernández Mañueco era secretario general del PP de Castilla y León, además de presidente nacional del Comité de Derechos y Garantías, y subrayó que «algo habrá tenido que ver en esa política de degeneración».

Igualmente, calificó de «sangrantes» y un «insulto a la inteligencia» de los ciudadanos que en uno de los puntos (sexto) se garantice a pymes y autónomos el cobro en tiempo de las facturas cuando existe una ley o que el apartado undécimo recoja que «se procurará penalizar» en los concursos de obra pública las ofertas de empresas que no cumplan con los niveles de calidad o que presenten modificados sin estar debidamente justificados.

«No quitan chiringuitos», censuró en relación con otra propuesta electoral de Ciudadanos, para enumerar algunos de los que proponen crear como la oficina independiente para evaluar las inversiones, una agencia de evaluación de las políticas públicas y la calidad de los servicios o una oficina de lucha contra el fraude.

Por otro lado, expresó la preocupación de su partido por que se rebajen acuerdos de Comunidad, como la inversión de un tres por ciento de los presupuestos en I+D+i. «Mucho tiempo a repartir sillones, al chalaneo, el mercadillo», resumió, para recalcar que las cien medidas carecen de «ambición» y de un proyecto autónomo al «venir de fuera dos señores de negro para tutelar el proceso y que nadie se saliera del camino marcado».

Sin embargo, fue en el apartado sobre despoblación donde enfatizó la crítica por proponer un grupo de trabajo para elaborar un diagnóstico durante un año. «¿Otro grupo? De verdad. Es un insulto a la inteligencia de las personas que viven en territorios despoblados», aseveró, según recoge Ical.

«No le votaron para que suscribiera acuerdos como éste», reiteró la dirigente socialista sobre Igea, después de subrayar que el 26 de mayo los ciudadanos «dijeron alto y claro que querían un cambio» y añadió que las dos opciones son apostar por el partido ganador (PSOE) o la «degeneración» del PP.

En un día en que Toni Roldán anunció su marcha de Ciudadanos por el «alto coste para España» del giro a la derecha del partido, Barcones recordó a Igea que ése es el «camino marcado» tras insistir que está haciendo «lo contrario» de lo prometido durante la campaña.