Un nuevo enemigo se suma al objetivo del montañero abulense Carlos Soria de ascender a la séptima montaña más alta de la tierra.  El propio montañero abulense, de 82 años, anunciaba a través de sus redes sociales que el coronavirus ha llegado hasta el campo base del Dhaulagiri, lo que retrasa los planes de su expedición para coronar uno de los dos ochomiles que le restan para completar la ascensión a los 14 que hay en el mundo.

Soria informaba que «como ya sucedió en el Everest, el COVID-19 ha llegado a nuestro campo base», comentando que desde el pasado martes «se han detectado los primeros casos positivos y están siendo evacuados en helicóptero».

Para tranquilidad de todos sus familiares y seguidores, el montañero abulense adelantaba que «nosotros nos encontramos en buen estado», asegurando que están tomando «todas las precauciones posibles».

Lo más negativo de la situación es que ahora mismo «la prioridad en estos momentos es controlar la situación y preocuparse por la salud de todos», más que pensar en el ascenso a la montaña, lo que trastoca el calendario de ascenso previsto en la expedición patrocinada por Movistar.