Los empleados de Caixabank, dispuestos a judicializar el ERE

M.M.G.
-

El plazo de negociación del Expediente de Regulación propuesto por la entidad financiera y que en Ávila afecta a 54 empleados, finaliza este martes. Los sindicatos lamentan «el enrocamiento» del banco

Los empleados de Caixabank, dispuestos a judicializar el ERE

Un día más, los trabajadores de Caixabank en Ávila salieron este martes a la calle para  protestar por el Expediente de Regulación de Empleo propuesto por la entidad financiera y que en Ávila afectaría directamente a 54 personas. 

Lo hacían justo el día en el que concluía el plazo formal de negociación marcado por los actores implicados en la misma y, salvo acuerdo de última hora, con noticias negativas para los empleados.

Así lo confirmaba ante los medios de comunicación Eduardo Piñero, secretario general de UGT en Caixabank Castilla y León. «Hoy la empresa está enrocada y no nos ha quedado más remedio que hacer una huelga general para reivindicar lo que entendemos es nuestro derecho», lamentaba el responsable sindical.

Se refería a la decisión de Caixabank de establecer despidos forzosos, sin voluntariedad por parte de los trabajadores, y el cierre de oficinas en toda la región.

Una decisión que, anunció, de no variar a lo largo del día de ayer, tendría consecuencias directas por parte de los sindicatos: la judicialización del tema.

«Aproximadamente uno de cada cuatro trabajadores de la región se ve involucrado en este asunto», apuntó Piñero un dato que es también extrapolable a la provincia de Ávila y que no quiso dejar de lado el «cierre masivo de oficinas tanto en la red rural como en las localidades de más de 10.000 habitantes».

Esto, recalcó, supone un impacto en los trabajadores de la entidad financiera. Pero, también, «en la calidad en el servicio a nuestra clientela y a la sociedad en general».

De no alcanzar el acuerdo deseado por los trabajadores, prosiguó Piñero, «la situación es clara, nítida y cristalina».

«En un ERE, un posicionamiento de la empresa tan sumamemente enrocado como éste, con unos beneficios históricos hasta en un año de pandemia, es un sin sentido», argumentó su posicionamiento el responsable sindical que insistió en que los trabajadores no pueden aceptar en este proceso «aquello que no vaya relacionado con la voluntariedad».

De esta manera, Piñero anunció que «si la empresa no cede en su posicionamiento no cabe la menor duda de que no vamos a firmar y no vamos a ser copartícipes de esta ilógica, por lo que judicializaríamos. Iríamos al juzgado para poder sacar un ERE en todo caso voluntario», recalcó.

Antes de concluir sus palabras, Piñero también quiso dejar claro que elEREno implica sólo la pérdida de empleos, que en Ávila serían 54, como apuntábamos antes. «No sólo se trata de despidos, sino también de la modificación sustancial de las condiciones laborales y del modelo de negocio», avisó. Y eso, dijo, «implica el cierre masivo» de oficinas.

Sería un cierre que afectaría al 25 por ciento de las oficinas de Caixabank. «En Ávila no hay datos exactos de qué oficinas serían», se despidió.