"Menos críticas al Gobierno de Pedro Sánchez y más cumplir las promesas realizadas a esta provincia". Ese es el mensaje que los procuradores del PSOE en las Cortes de Castilla y León Miguel Hernández y Soraya Blázquez lanzaron este martes al consejero de Fomento, Juan Carlos Suárez-Quiñones, tras su reciente visita a Ávila en la que, a juicio de estos parlamentarios, "mostró el estado de nerviosismo de la Junta ante la investidura y constitución del nuevo Gobierno de España". Hernández subrayó que el consejero "vino a hacer promesas que siguen sin cumplirse" y puso como ejemplo la depuración, pues "habló de enormes inversiones, unos 20 millones de euros pero no dijo dónde irán destinados, de qué partida presupuestaria saldrán y en qué medida tendrán que financiar esos proyectos los ayuntamientos para cumplir la normativa europea, o si existen alternativas a la depuración convencional más respetuosas con el medio ambiente".
Según el procurador socialista, Suárez-Quiñones es "el que más partidas consignadas deja sin ejecutar, por ejemplo en vivienda, donde no se ha ejecutado el 30%" y además "deja tirados a los cazadores de esta Comunidad al retirarse de la acusación particular en un juicio contra cazadores furtivos cuando la Junta debería llegar hasta el final para demostrar que está luchando contra el furtivismo". También calificó Miguel Hernández como un "brindis al sol" la promesa del consejero de dar cobertura de internet a todo el territorio, para concluir afirmando que "realiza promesas vacías para decir que la Junta está ahí frente al Gobierno de Pedro Sánchez".
En la misma línea la también procuradora del PSOE por esta provincia Soraya Blázquez recordó al consejero de Fomento que "ya hace ocho meses que se celebraron las elecciones municipales y autonómicas y es hora de empezar a trabajar por las necesidades de todos los castellanos y leoneses, que la Junta tiene como actuaciones futuras". Así hizo referencia al transporte para criticar que "haya que esperar hasta 2022 para tener un transporte público que una los pueblos de la provincia con Ávila capital cuando hay más de 100 municipios que no lo tienen y otros tantos con transbordos de lo más dispares". "
Por ello pidió a los responsables de la Junta de Castilla y León que "dejen de meterse con el recién creado Gobierno de España y empiecen a gobernar en la Comunidad, acometiendo sus competencias".