La candidata a la Alcaldía de Ávila, Sonsoles Sánchez, rechazó cualquier tipo de división en el seno del partido en la provincia y atribuyó la demora en la elección del candidato, que hizo que no fuera hasta ayer por la noche “a última hora” cuando supo que era la elegida para optar a la Alcaldía de la capital abulense, a que el PP de Ávila es un partido “abierto y comunicativo”.

Sánchez incidió en que los 'populares' abulenses cuentan con un presidente “muy receptivo” y estimó que todo el proceso se debe a un “signo de salud democrática” y a la presencia de “gran calidad de personas” en la formación. “Todos los nombres que se han barajado y muchos más podrían haber llevado a cabo cualquier proyecto”, aseguró.

Rechazó cualquier tipo de personalismos y aseguró aceptar este “reto” como “una pieza más de un engranaje de algo mucho más rico en lo que es ilusionar, implicar y hacer partícipes a un número grande de compañeros, simpatizantes y abulenses”, dijo. A su juicio, las individualidades suponen formas de proceder “trasnochadas”, mientras que consideró que los ciudadanos buscan “proyectos integradores que permitan conseguir grandes objetivos compartidos por todos”, declaró.

Tras conocer su designación, reconoció afrontar su candidatura “con mucha ilusión” en lo que será el “primer paso” de una trayectoria en la que apostó por trabajar y ponerse a disposición “de todos” y aunar “distintos perfiles y sensibilidades en un proyecto común”. Además, no ocultó que en alguna ocasión le habían propuesto la posibilidad de que pudiera encabezar el proyecto