Éxito. Así valora la organización la VII edición de la Spain Classic Raid, que finalizaba a las puertas del Palacio de Madrid tras cubrir más de 2.000 kilómetros de caminos en la primera edición que ha pisado suelo portugués y que tuvo su parada en Ávila como punto de meta de la penúltima jornada y salida ya en la jornada final. De Andorra a Madrid, pasando por Portugal, el VII Spain Classic Raid ha dejado buen sabor de boca a los participantes, muchos de los cuales ya se han inscrito para el año que viene.
Más de cien coches clásicos tomaron la salida en Andorra el pasado 19 de octubre. En sus ocho etapas el VII Spain Classic Raid ha pasado por Jaca, Soria, Valladolid, Ciudad Rodrigo (Salamanca), las portuguesas Aveiro y Covilhã, Ávila, y Madrid. Tramos de mucha piedra como los andorranos, zonas con algo de barro, muchos charcos, tramos del Mundial de Rallyes en Portugal y los circuitos de Bercimuel en Segovia y Cerro Negro en Talavera de la Reina han hecho las delicias de los participantes, amantes de estas auténticas joyas del motor.
Un raid muy disputado hasta el final, cuando se impuso el VW Golf Country de Ramón Franquesa Salado y Ramón Franquesa Alberti. El segundo clasificado fue el Mitsubishi Montero de Ricardo Ferrón y Vicenç Llenas, seguidos del Fiat Panda 4x4 de Leo Fahey y Pablo Llano.
Tras el reagrupamiento en la meta situada en pleno corazón de Madrid, se celebró la cena de despedida y entrega de trofeos de final de raid, donde no sólo los ganadores de las diferentes categorías fueron premiados, también los equipos mejor clasificados de diferentes marcas, como Renault, Peugeot, VW, Toyota, Mitsubishi y Suzuki. Además, la organización entregó premios especiales, entre otros, a Antonio Arias y Santiago Vázquez (Seat Marbella), al equipo del Volvo PV544, Carlos Basart Nogueron y Carles Basart Navarro, por ser capaces de completar el raid con un vehículo tan antiguo y al único equipo formado por féminas, Inés Amil y María Lizarriturri, que completaron el raid al volante de un Fiat Uno.