Un total de 2,7 millones para obras de emergencia

P.R.
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Los consejeros de Medio Ambiente y Agricultura y Ganadería se reunieron en Navalmoral con representantes de las OPAS, alcaldes de pueblos afectados y Asocio para informar sobre las medidas urgentes para mitigar los efectos del incendio

Un total de 2,7 millones para obras de emergencia - Foto: Ricardo Munoz Martin (Spain) www

La Junta de Castilla y León anunció ayer mañana medidas de emergencia tanto en materia de medio ambiente como de ayudas a la ganadería que ya está aplicando en las zonas afectadas por el incendio que arrasó hace unos días 22.037 hectáreas de la Sierra de la de la Paramera, en la provincia de Ávila, según los datos definitivos dados a conocer en la mañana de ayer por el consejero de Fomento y Medio Ambiente Juan Carlos Suárez Quiñones, quien junto con el consejero de Agricultura y Ganadería, Jesús Julio Carnero, mantuvieron varias reuniones con las organizaciones profesionales agrarias, con los alcaldes de los 14 municipios afectados por el incendio y con el Asocio, mancomunidad de municipios de la provincia de Ávila propietaria de una parte de los terrenos forestales que ha afectado el incendio.

Suárez-Quiñones informó de las actuaciones de emergencia sobre el abastecimiento de agua de consumo y la restauración del territorio afectado por el incendio, por un importe de 2,7 millones de euros, que serán aportados tanto por el Ministerio como por la Junta y también ha anunciado la presentación de un próximo Plan de restauración próximamente. 

José Julio Carnero agradeció la labor que está desarrollando la Diputación con la distribución del alimento que llega al ganado procedente de donaciones que están llegando de distintos ligares de la provincia, de la comunidad y también de numerosas partes de España. De ahí que reconociera la importante labor desarrollada por esta institución provincial que calificó de «infantería de la administración en el territorio» y recalcó la importancia que tienen estas administraciones que «en una situación extraordinaria como esta pone de manifiesto su utilidad por su cercanía con el territorio y la actuación inmediata». También ensalzó el trabajo desarrollado desde la Delegación Territorial de la Junta en Ávila y de su delegado territorial.

En el transcurso de la rueda de prensa el consejero Suárez-Quiñones, informó de los datos definitivos de un incendio que ha asolado 22.037 hectáreas de terreno, de las cuales 2.738 son de masa forestal arbolada, tanto en bosque abierto como cerrado (12’4%); 5.788 hectáreas (26’3%) de matorral y monte con arbolado disperso; 12.785 hectáreas (58%) de pastizal; 893 hectáreas (4’1%) de superficie de tipo agrícola; y 5’52 hectáreas de otros tipos de superficies.

En cuanto a Montes de Utilidad Pública (MUP) dijo se han visto afectados 5, además de un consorcio, siendo la afección más relevante la del MUP nº 47 ‘Sierra de Ávila’ perteneciente a la Mancomunidad Municipal Asocio de Ávila. Se ha quemado en su totalidad, en concreto, unas 6.700 hectáreas de las cuales 2.250 hectáreas eran repoblaciones arboladas de pino silvestre (pinus sylvestris) de 10 a 60 años de edad. En su mayor parte esta masa arbolada se encontraba en el término municipal de Sotalbo, uno de los municipios más afectados por este incendio. El 85% de las masas arboladas afectadas son de pino silvestre, en masas adultas o repoblaciones de diferentes edades de madurez. El resto de especies afectadas, en mucho menor porcentaje, son encinas, pino resinero, rebollo, chopo y fresno.  

El consejero de Fomento y Medio Ambiente se refirió a que las actuaciones inmediatas para la actuación de los terrenos quemados se enfoca desde varios ámbitos y fases, con varias administraciones involucradas y con distinto grado de urgencia de las actuaciones.

Como fase preliminar, dijo el consejero, «desde el primer momento los técnicos de la Consejería están trabajando en evaluar los riesgos, analizar la afección a captaciones para abastecimiento de agua a poblaciones, y definir y programar las actuaciones necesarias, en el ámbito de sus competencias, elaborándose las memorias técnicas necesarias y proyectos necesarios para las propuestas de emergencia». Informó también que hoy mismo técnicos del Ministerio de Transición Ecológica están recorriendo la zona para evaluarla. Como fase de emergencia, los principales riesgos en estos momentos están relacionados con la erosión, los arrastres de cenizas y suelo a los cauces, la posibilidad de ocurrencia de plagas forestales consecuencia de la madera quemada de coníferas, y especialmente los perjuicios a la actividad ganadera y la afección a áreas de captación de agua para abastecimiento.

Captaciones de agua. Por parte de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, dijo también el consejero, se ha elaborado desde el incendio el estudio del estado de las captaciones de agua para consumo de los 11 municipios, y se han redactado los proyectos de las obras de emergencia a realizar. En este sentido Suárez-Quiñones puntualizó que «ya se ha hecho la contratación de emergencia de estas obras por importe de algo más de 700.000 euros». Y adelantó que está previsto que comiencen la próxima semana. Indicó también que tanto desde la Diputación provincial de Ávila como la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, se abastecen de agua potable los depósitos que tengan que ver cerrada su entrada de la captación para garantizar la calidad y cantidad de agua potable hasta el restablecimiento de la seguridad en la calidad, por los problemas que surgen con los arrastres que se producen estos días como consecuencia de la lluvia que está afectando a la zona del incendio. Otra medida urgente destacada por el consejero de Medio Ambiente es la madera quemada de coníferas de aprovechamiento comercial de los montes afectados, a fin de evitar plagas y enfermedades forestales. De estos trabajos se ha ocupado al equipo forestal de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, que ha preparado los pliegos de licitación para la venta de la madera, que se publicarán la próxima semana. Entre los objetivos está «evitar las enfermedades y plagas y obtener un rendimiento para los municipios del Asocio de Ávila, una cuarta parte al menos de cuyos recursos revertirán también la restauración de la zona».  También adelantó que una vez realizadas las labores materiales de extracción, comenzaran los trabajos de repoblación forestal.

Por otro lado, e integrado en el Plan de Restauración del Territorio, que implicará medidas, actuaciones e inversión durante varios años y que llevarán a cabo la Junta y el Ministerio de Transición Ecológica biodiversidad. Se trata de unos trabajos que ya han comenzado y se han producido reuniones entre los diferentes equipos.  También informó Suárez-Quiñones que se ha revisado la Instrucción que regula las limitaciones al aprovechamiento ganadero en los montes afectados por incendios forestales previstas por el artículo 92 de la Ley de Montes de Castilla y León, de cara a permitirlo en la próxima primavera en el pasto recuperado en la mayor parte de la zona afectada, y en concreto en toda la previamente ocupada por pastizales, desde el momento en que sean aprovechables por el ganado y para su aportación a la PAC, de conformidad con la cláusula de excepción prevista en el propio precepto. 

Inversiones. En esta primera fase de emergencia se contará con una inversión de un millón de euros de la Junta y otra cantidad igual del Ministerio de Transición Ecológica y para el Reto Demográfico, que permitirá desarrollar las actuaciones de recuperación urgente en el territorio en materia de aguas mencionadas así como la actuación de cuadrillas para la trituración ´in situ’ 200 hectáreas en masas sin aprovechamiento comercial, realización de 3.695 metros lineales de albarradas, como cordón de retención del suelo, la realización de 37 kilómetros de cerramiento ganadero nuevo, la retirada de 10 kilómetros de cerramiento, la construcción de 10 pasos de agua, la siembra de 50 hectáreas de piñón y la realización de 65 unidades de reparación de pasos de agua y otras infraestructuras. Todo ello conforme a los proyectos en los que ha venido trabajando el personal técnico de la Consejería.

Asimismo, con la colaboración económica de 2 millones de euros, y técnicos de las Confederaciones Hidrográficas, se actuará en las zonas de dominio público hidráulico, realizándose pequeños diques o albarradas en los cauces afectados, y otras actuaciones en materia hidráulica. También anunció el consejero de Medio Ambiente que estas actuaciones de emergencia se desarrollarán en la zona en el medio plazo, y que forman parte de una programación general de restauración de la vegetación y repoblaciones forestales, infraestructuras y otras actuaciones de conservación a la biodiversidad no urgentes, sobre la base de un Plan que se presentará la semana   próxima.

El  consejero de Agricultura y Ganadería Jesús Julio Carnero habló de la creación de un Plan de Ayuda a la ganadería afectada por el incendio, «que será abierto y flexible y que está atendiendo y dando respuesta a las demandas y necesidades de los agricultores y especialmente de los ganaderos afectados por dicho incendio». Aclaró que este Plan de apoyo comprende dos grandes grupos de actuaciones, por un lado, el relativo a garantizar suministros al ganado afectado y, por otro, el referente a las infraestructuras agrarias.

Informó también que desde el pasado 23 de agosto y «gracias al compromiso de la Junta para el abastecimiento alimentario de forraje y agua a las explotaciones ganaderas afectadas, se está suministrando, a demanda de los ayuntamientos, pacas de paja para la alimentación del ganado. Ya se han distribuido 257 toneladas y  se han  colocado 29 abrevaderos con capacidad para surtir 38.000 litros de agua diarios que se rellenan según se van agotando».

Estos abrevaderos se están colocando, con carácter general, en las zonas de pastos comunes y su gestión se hace en colaboración con los ayuntamientos. No obstante, aclaró el consejero de Agricultura que en caso de que sea necesario colocarlos en alguna explotación de forma puntual, se podrá realizar consensuado siempre con el ayuntamiento donde se sitúe la explotación en cuestión.  De acuerdo con los primeros análisis de situación elaborados por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, en el conjunto de estos municipios estarían afectadas cerca de 300 explotaciones ganaderas que cuentan con 33.000 animales (de las cuales el 45% son de ganado bovino y el 53% de ovino y caprino). Existen diferentes grados de magnitud, que llegan a niveles de hasta el cien por cien de la superficie quemada en algunos casos. La superficie de pasto quemada que era aprovechable por el ganado se sitúa en algo más de 14.000 hectáreas. Otro de los apartados previstos para intervenir es en el de las infraestructuras agrarias. Carnero ha anunciado que «en este mes de septiembre se va a convocar una línea de ayudas para el cercado de pastos comunales que tendrá como novedad la prioridad de los afectados por el incendio». Además dijo que «en caso de que por razones de urgencia sea preciso acometer alguna actuación puntual de reposición de postes, esta se llevará a cabo por la Administración, con ese carácter y con medios propios».

Al mismo tiempo, la Consejería asume el compromiso de reparar aquellos daños ocasionados por las llamas en caminos rurales o infraestructuras viarias. Además de todo ello, el consejero ha recordado «la posibilidad de la utilización por parte de los titulares de las explotaciones ganaderas de la línea de apoyo con préstamos garantizados por el Instrumento Financiero que la Consejería tiene abierta, con hasta 200.000 euros para circulante, contemplándose la posibilidad de carencia entre uno y tres años».

Por otra parte, en relación con la presencia de desmán ibérico en la zona afectada, se está colaborando con la Confederación Hidrográfica del Duero para analizar primeramente el grado de afección en los tramos identificados con presencia de la especie y articular en consecuencia las medidas que se prevean más efectivas, tanto               sobre la especie como sobre su              hábitat.