El Consejo de Gobierno de la Universidad Católica de Ávila (UCAV), tras el comunicado emitido por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Castilla y León ante la situación creada por el COVID-19, acordó cerrar sus puertas y suspender la actividad lectiva presencial sustituyéndola por la modalidad de teletrabajo apoyada en la herramienta del aula virtual.
Ésta es una de las medidas de carácter preventivo que se empezaron a observar a partir de la tarde de este viernes, 13 de marzo, y que se mantendrán hasta nueva orden en función de la evolución de la situación epidemiológica.
Otra de las medidas que se acordó fue que los profesores atenderán a los alumnos en los horarios de tutoría según el horario habitual publicado en la Plataforma así como el Servicio de Orientación Académica. Además recalcan que «la Universidad procurará y hará lo posible para que el sistema de enseñanza no se vea afectado ni interrumpido».
De igual modo, se insiste en que «no se atenderá presencialmente a ningún alumno en los Servicios de la Universidad, lo que no afectará a la gestión y tramitación de sus expedientes, debiendo remitir cualquier documentación y realizar las comunicaciones pertinentes a través de los medios telemáticos».
También puntualizan que «la Universidad informará en todo momento, de modo fiable y transparente, a través de sus medios habituales (comunicados oficiales, página web y redes sociales) de todo aquello que pueda afectar a la comunidad universitaria.
Finalmente, en colaboración con las autoridades estatales y autonómicas, piden «a los profesores, personal de administración y servicios y alumnos que eviten realizar viajes innecesarios y pongan en práctica, de manera responsable, los consejos y advertencias procedentes de las autoridades para hacer frente a esta situación de emergencia».