Pleno extraño e histórico el celebrado este jueves en la Diputación Provincial de Ávila, ya que debido a las medidas decretadas por el estado de alarma en el país debido a la expansión del coronavirus, solo tres de los 25 diputados que lo componen, asistieron al Salón de Plenos del Torreón de los Guzmanes, y los demás lo siguieron por videoconferencia.

En poco más de tres cuartos de hora se despacharon todos los asuntos que estaban incluidos en el orden del día, destacando fuera de la actualidad provocada por el COVID-19 en la provincia, la aprobación, por unanimidad, como sucedió en el resto de apartados, del proyecto de obras y expropiación para la ejecución de la obra de la carretera AV-P-503, entre Solosancho y Baterna,  que tiene un presupuesto base de licitación de 282.643,21€, y la valoración correspondiente a las indemnizaciones en la expropiación a practicar la de 14.820,3, para poder realizar estas obras de acondicionamiento y ensanche, que tuvieron su aprobación inicial en el Pleno de la Diputación Provincial del mes de octubre del pasado año.

Junto con este punto, también se dio el visto bueno a la revisión de precios del contrato del servicio de comedor y cafetería del centro residencial Infantas Elena y Cristina; a la aprobación inicial del reglamento de organización y funcionamiento del Consejo Provincial de personas con Capacidades Diferentes; a la devolución de la fianza constituida por la empresa adjudicataria del contrato de Servicio de Ayuda a Domicilio;a la aprobación de un crédito extraordinario así como a reconocimientos extrajudiciales de créditos;y a una modificación del convenio entre la Diputación y Confae.

La lectura de las víctimas de violencia de género, y el capítulo de ruegos y preguntas, centrado en cuestiones sanitarias, cerró la sesión.