Es tiempo de setas, la temporada viene mejor que el año pasado y además de la pertinente regulación que ya tenía gran parte de la provincia dentro de la Unidad de Gestión Gredos, ya está en vigor un nuevo decreto de la Junta de Castilla y León que hace más complicada la recolección micológica y también su vigilancia. Por ello desde la Subdelegación del Gobierno en Ávila iniciaron ayer un curso sobre micología básica a agentes de la Guardia Civil. 

En principio iba a ser solamente el Servicio de Protección de la Naturaleza el que acudiese a estas jornadas de formación; sin embargo, por la amplitud del fenómeno de la recolección de setas y las normas que han comenzado a regularla desde el pasado año, se considera conveniente que también el Greim (los agentes de rescate en montaña) y la Unidad de Seguridad Ciudadana participen en dicho curso. 

Por lo tanto, al recaer en la Guardia Civil la vigilancia y control de las recolecciones de setas, se ha considerado necesario instruirles en esta materia, tanto en lo que se refiere a la legislación sobre permisos de recogida como a las condiciones sanitarias para su comercialización. La complejidad de este novedoso cometido ha hecho preciso establecer este curso sobre un asunto que tiene diversas vertientes y que es preciso conocer para llevar a cabo el trabajo.

La misión de los agentes. El subdelegado del Gobierno Arturo Barral inauguró ayer la sesión de la primera jornada dando la bienvenida a los asistentes y haciendo hincapié en la importancia de esta nueva misión. Se ha referido a la legislación en Castilla y León sobre el cada vez más extendido hecho de la recogida de setas en los montes y a la gran diversidad de hongos existentes, tanto los que poseen características comestibles y de aprovechamiento comercial, como los de naturaleza tóxica, y que por ello debe impedirse su llegada a cualquier circuito de distribución. Ha señalado también el subdelegado Arturo Barral que la mitad del territorio de la región es forestal, llegándose a  estar identificados más de un millar de especies de hongos silvestres.

La producción primaria que sale de los montes, se estima en 14 millones de euros en la comunidad autónoma, a los que hay que sumar otros 26 millones por la producción industrial de setas por las industrial agroalimentaria.

En el curso se han inscrito 25 guardias civiles, que se desarrollará también durante hoy y mañana. Igualmente, una segunda edición tendrá lugar, con el mismo programa,  para otra veintena de miembros del citado cuerpo los días 19, 20 y 21.

El director del curso es Rafael Aramendi, jefe en funciones de la Unidad de Protección Civil de la Subdelegación y vicepresidente de la Sociedad Micológica Amagredos. Como profesores invitados, también intervienen la técnico de Micocyl Gemma López Zamorano y Carlos Aramendi Campón, científico en tecnología de los alimentos.

La actividad pedagógica tiene una primera función de dar a conocer las características generales de los hongos, sus grupos y también sus diferencias. Posteriormente, se pasa a la legislación sobre el aprovechamiento micológico establecido en este caso para  Castilla y León. Y por último, una tercera fase del curso se dedica a clases prácticas en el campo (donde mejor se aprende) con examen acerca del reconocimiento de las variadas especies.