El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, confirmó este martes la previsión de que en septiembre de 2022 la Comunidad dispondrá de un transporte público universal que sea «moderno, tecnológico y de calidad», que conecte todos los núcleos de población del territorio autonómico, y por supuesto la provincia de Ávila. Así lo dijo durante la celebración de la sesión de control al Ejecutivo celebrada este martes en las Cortes, donde Suárez-Quiñones cifró en un 84,8 por ciento el número de núcleos de población de Ávila que cuenta con conexión por carretera, aunque no ocultó su intención de «llegar a la totalidad» a lo largo de la legislatura.
Suárez-Quiñones, que respondió al procurador de Por Ávila en el Grupo Mixto, Pedro José Pascual Muñoz, quien pidió conocer las medidas para que el transporte público conecte los pueblos de la provincia de Ávila con las cabeceras de comarca y la capital, recordó la situación actual del transporte público de viajeros en la provincia.
En este sentido, aludió a 15 contratos concesionales que se prestan de manera convencional y a través del transporte a la demanda, de forma que 393 núcleos de población de los 463 de la provincia abulense tienen transporte a la demanda y el resto cuenta con otras líneas de transporte, tanto prestados por la Junta o por el Estado. Pero la Junta sigue trabajando para completar el servicio con la publicación de la Ley del Transporte Público por Carretera de la Comunidad, según la cual está previsto que en marzo de 2022 puedan empezar las licitaciones del servicio «consensuado» para que en septiembre de ese mismo año pueda disponerse de un transporte público universal a todos los núcleos de población de Castilla y León.
Sin embargo, el procurador de Por Ávila incidió en la «discriminación» a la que se ven sometidos el 60 por ciento de los abulenses que residen en zonas rurales, que tienen «malas comunicaciones» por la falta de un transporte público de calidad. Pascual Muñoz lamentó que a pesar de esta situación «se llena la boca hablando de despoblación o sangría poblacional».
A juicio del procurador de Por Ávila, un transporte adecuado «mejoraría la situación de estas personas» y pidió al consejero que las promesas «no se queden en palabras bonitas», sino que la Junta se comprometa «de verdad» con el medio rural porque, de lo contrario «la despoblación y la sangría demográfica se acentuarán» y eso relegará a los pueblos y a sus vecinos «a un segundo plano».