El futuro del Real Ávila, en manos del economista Aurelio Gurrea

A.S.G.
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Facultades intervenidas pero no suspendidas. El auto acuerda la intervención de las facultades de administración y disposición del deudor, pero entiende que no existen razones suficientes que justifiquen la suspensión de las mismas.

Concurso admitido. El Juzgado de lo Mercantil admite la declaración del concurso de acreedores solicitado por el Real Ávila el pasado 8 de enero ante el conocimiento desde el club encarnado de una deuda de 857.000 euros.

• A partir de la publicación en el BOE del auto se establece un periodo de un mes para que todos los acreedores puedan presentar las deudas que mantienen con el Real Ávila.

El Real Ávila ya se encuentra oficialmente en régimen de concurso de acreedores. El Juzgado de loMercantil acordaba admitir la declaración de concurso   voluntario del Real Ávila –solicitado el pasado 8 de enero desde el club encarnado ante el conocimiento de una deuda de 857.000 euros– y poner la administración concursal en manos del economista, abogado y profesor Aurelio Gurrea Chalé, «economista con experiencia profesional de, al menos, cinco años de ejercicio efectivo» acredita el auto que se hacía publico en la tarde del lunes. Un administrador que es precisamente el mismo que llevará el concurso de acreedores de Aguas de Fontedoso S.L. Será a partir de este momento –el auto señala un plazo de cinco días para manifestar la aceptación del concurso– el encargado de decidir el futuro del Real Ávila y lo hará de la mano de sus actuales dirigentes toda vez que el auto del concurso declara intervenir pero no suspender las facultades de administración y disposición sobre el patrimonio del deudor, al que se le reclama colaborar e informar de todo lo necesario.  Y todo ello con un plazo por medio de un mes –a partir de la publicación en el BOE– en el que los actuales acreedores deberán hacer constar sus deudas con el club encarnado.

Según se desprendía del auto, y a tenor de la documentación aportada en su momento desde el club encarnado, el Juzgado de lo Mercantil, cuya titular es María Carmen del Peso, consideraba «procedente» la declaración de concurso voluntario «por cuanto de la documentación aportada se desprende» que el Real Ávila «no cumple regularmente con sus obligaciones exigibles, como demuestra la lista de acreedores aportada». Precisamente el auto señala que a partir de la publicación en el BOE de la declaración de concurso se abrirá el plazo de un mes para que todos aquellos acreedores puedan presentarse al concurso. «Los acreedores del concursado comunicarán a la administración concursal la existencia de sus créditos en la forma y circunstancias y con la documentación señalada por el Juzgado.La administración realizará sin demora una comunicación individualizada a cada uno de los acreedores».

Limitación, no suspensión. Uno de los puntos claves del auto es aquel en el que se constata que, por lo pronto, los actuales dirigentes del Real Ávila podrán trabajar junto al administrador concursal en este proceso. Desde antes de conocer la aceptación del mismo –siempre se consideró que sería así– se puso sobre la mesa el compromiso de trabajar «junto al administrador concursal» para «colaborar» en el objetivo de sacar el Real Ávila hacia adelante. «Nos quedamos en el club y nos comprometemos a seguir trabajando para lograr una salida» señalaban poniendo sobre la mesa sus pretensiones de establecer un convenio y plan de viabilidad desde el que «dar la vuelta a la situación», señalaba hace unos días David Rueda.

Pretensiones que serán posibles toda vez que el auto de la jueza interviene las facultades de administración y disposición del deudor pero no las suspende, lo cual hubiera imposibilitado dichos objetivos.

«Se acuerda la intervención de las facultades de administración y disposición del deudor. En el presente caso no hay razones en este momento inicial del procedimiento que justifiquen la suspensión de dichas facultades.Por tanto se estima procedente para el interés del concurso el régimen de intervención de las facultades de administración y disposición sobre el patrimonio del deudor» puntualiza textualmente el auto emitido en la tarde del lunes, que además apunta al «deber» del deudor de «colaborar e informar en todo lo necesario o conveniente para el interés del concurso».