Cierra el Paisanaje Sonoro con gran éxito en los eventos

M. Lumbreras
-

La primera edición del festival organizado por Masav consigue atraer a los vecinos de la zona con sus conciertos y charlas sobre patrimonio

Cierra el Paisanaje Sonoro con gran éxito en los eventos

La primera edición del festival Paisanaje Sonoro ha sido un absoluto éxito entre los abulenses. Las actividades han sido bastante respaldadas por el público y los conciertos han traído a la comarca del Valle Amblés a algunos de los mejores grupos nacionales e internacionales de sus respectivos géneros. 

La jornada del sábado se inició con una subida al monasterio de Nuestra Señora del Risco, en Amavida. Guiados por el dulzainero y profesor de música Germán Alameda, los 80 asistentes pudieron disfrutar de una explicación detallada sobre la historia de las ruinas de este centro religioso del siglo XVI de la orden de San Agustín. Tras la explicación, Alameda ofreció un pequeño recital de dulzaina ante el Valle.

Posteriormente, en el campo de fútbol de Solosancho tuvo lugar, a cargo de miembros de Masav, un campeonato de tiro prehistórico en el que participaron 15 personas que pudieron comprobar su precisión con el arco y el propulsor.

La Asociación Cultural Tañidos Sonoros ofreció pasados unos minutos del mediodía el ‘Campanaje sonoro’, en el que se pudo disfrutar de  20 minutos de concierto con la música tradicional que se tocaba con campanas en los pueblos en épocas pasadas.

Por la tarde, el centro cívico de Solosancho acogió a la vez dos eventos: un taller de gorras serranas que estuvo a cargo del Grupo de Mujeres de Solana del Rioalmar y la exposición fotográfica del artista Joaquín Díaz ‘Pequeño Patrimonio Tallado en Piedra’.

En cuanto a los conciertos, la música dio comienzo de la mano de la artista Vanesa Muela, quien dio una auténtica lección de folk tocando música tradicional con instrumentos que ya no es tan común ver en los escenarios actuales, como satertenes, cucharas o cáscaras de nuez.

Tras la actuación de Muela, llegó el turno de la banda abulenses Trebejo, quienes llevaron a cabo un homenaje a la música traicional de la provincia y de la comunidad castellanoleonense.

Free Folk llevaron su animada música a los escenarios del Paisanaje, donde consiguieron arrancar bailes y ritmos muy vivos que hicieron vibrar al público. Junto conDivertimento Folk, que tocaron tras ellos, este fue el momento de más afluencia del festival, alcanzando el pico de las 1.500 personas.

Finalmente, los bretones Gwendal ofrecieron un recital plagado de grandes clásicos de la música folk como el Irish Jig o el Rainy Day en el que el público pudo comprobar que la legendaria banda de música celta sigue en plena forma.

Con esto se cierra un festival que promete dar vitalidad a la comarca durante mucho tiempo.