La Junta de Castilla yLeón está llevando a cabo en estos momentos actuaciones de mejora y conservación de carreteras de la red autonómica en la provincia de Ávila por valor de más de 13,2 millones de euros. Unas obras que, según explica el jefe del Servicio Territorial de Fomento, Luis Enrique Ortega, «se enmarcan dentro del Plan de Actuaciones Prioritarias que presentó el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, en las Cortes y son para mejorar la seguridad vial y la comodidad en la utilización de las vías por parte de los usuarios».
En el capítulo de obras de mejora figura la carretera AV-500, conocida como carretera de El Espinar, en el tramo entre Urraca Miguel y el límite con la provincia de Segovia, que cuenta con una inversión de 2.296.836,88 euros. Los trabajos se iniciaron en 2019 y aunque se vieron afectados por el estado de alarma, van a buen ritmo y «esperamos abrirla al tráfico en próximos meses, aunque los trabajos no estén totalmente terminados», apunta Ortega.
Con esta actuación se completará la mejora de la AV-500 hasta el límite con la provincia de Segovia, ya que hace años se ejecutó el tramo desde Ávila capital hasta Urraca Miguel. En cuanto a la parte segoviana de la vía, aunque ya se hizo alguna actuación en una rotonda a la salida de El Espinar, el proyecto de mejora está en fase de redacción. Además, también se está redactando el proyecto para el refuerzo del firme en el tramo que une Ávila con Urraca Miguel.
Por lo que respecta a las obras de conservación, la otra gran pata de este plan regional, señala el jefe del Servicio Territorial de Fomento que «debido a que hay carreteras afectadas por el uso de vehículos pesados y ligeros y por las inclemencias meteorológicas, es necesario llevar a cabo actuaciones de refuerzo del firme en distintas vías, que están en ejecución, aunque unas más avanzadas que otras», con un desembolso en su conjunto de 10.956.601,53 euros.
Así, en la AV-503 (de Ávila a Cebreros), con una inversión de 2.224.237,8 euros, se está echando una mezcla bituminosa en frío, se está renovando la barrera de seguridad y se están mejorando los drenajes superficiales, trabajos que concluirán a finales de este año. En la CL-505 (Ávila a La Cañada), por su parte, al tratarse de una carretera que discurre a gran altitud y que en invierno está sometida a fuertes cambios de temperatura y a tratamientos de vialidad invernal para hacerla transitable, se está echando una capa de aglomerado y posteriormente se realizará la reposición con una mezcla bituminosa en caliente, por lo que las obras concluirán a finales de 2021. La inversión es de 2.509.228,86 euros.
En la CL-605 (de Villanueva del Aceral a Madrigal de las Altas Torres), con 1.988.119,48 euros y un plazo de ejecución que concluirá en 2021, se ha reforzado el firme con mezcla bituminosa en caliente sobre el existente, se está renovando la barrera de seguridad y para evitar accesos directos se procede a la construcción y mantenimiento de vías de servicio paralelas a la carretera.
La obra de conservación de mayor cuantía, con 4.235.015,39 euros, se está ejecutando en la CL-507 (Sanchidrián-San Pedro del Arroyo), construida hace 28 años y que soporta un intenso tráfico de vehículos pesados. Aquí no solo se está actuando con una capa de refuerzo, sino que como tiene una base rígida de hormigón, se están haciendo juntas longitudinales y transversales para evitar que aparezcan fisuras en la superficie, que posteriormente se tratarán con mastic bituminoso, y se procederá a la reposición del firme con la extensión de capa de aglomerado de alta capacidad. Estas obras han comenzado en la segunda mitad de 2020 y abarcarán 2021 y parte de 2022.