Con la presencia del obispo de Ávila, José María Gil Tamayo, comenzó este martes la novena organizada por el Ilustre Patronato de la Ermita y Hospital de Peregrinos de Nuestra Señora de Sonsoles de Ávila para implorar las lluvias. A principios de agosto, Gil Tamayo envió una carta a los sacerdotes de la diócesis con el objetivo de que en cada eucaristía se introdujese una petición en la oración de los fieles y en la oración de la liturgia de las horas, solicitando al Señor que llueva, ante la «grave sequía» que se padece la provincia. También invitaba a asistir a esta novena, que se prolongará hasta el 4 de septiembre, a las 20,00 horas, en la ermita de Sonsoles. Cada día será ofrecida por una entidad y hoy de nuevo estará presidida por el obispo de Ávila.