Vuelta a los ancestros en Pedro Bernardo con los Machurreros

Pilar Bardera
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Ataviados con mascaras y traje militar, estos personajes corren y saltan por las calles cuchareras para que se oigan sus cencerros anunciando su llegada y con su vara arreando 'suavemente' a todo aquel que se acerca a ellos

Vuelta a los ancestros en Pedro Bernardo con los Machurreros

Carnaval suele ser un festejo donde la gente se disfraza, sale a la calle, disfruta, y en el caso de  Pedro Bernardo se espera la salida de las máscaras y vestimentas tradicionales. Desde hace unos años, el Sábado de Carnaval por la mañana recorren las calles del pueblo los Machurreros, personajes ancestrales, ataviados con mascaras y traje militar, que corren y saltan por las calles cuchareras para que se oigan sus cencerros anunciando que se acercan, con su vara arreando ‘suavemente’ a todo aquel que se crucen. De esta manera, durante casi dos horas hacen que los vecinos y visitantes conozcan esta tradición de valor etnográfico y cultural.

Estos personajes, cuya tradición se perdió durante cerca de un siglo, forman parte del patrimonio cultural de Pedro Bernardo que vio como la tradición quedó prohibida durante la Guerra Civil, aunque antaño salían cada domingo desde la madrugada del 1 de enero (San Silvestre), cuando daba comienzo el ciclo con la hoguera de quintos, hasta el mes de febrero (Las Candelas), siendo su día grande el Domingo Gordo o domingo de Carnaval.

Los Machurreros, como en años anteriores, son los quintos y quintas que el día 1 de enero prendieron la hoguera junto con voluntarios, padres, hijos, que como en otras ocasiones se han vestido para continuar manteniendo esta tradición. Recorren las calles del pueblo entre saltos, gritos, haciendo sonar sus cencerros y, por supuesto, haciendo travesuras como trepar por rejas y balcones o perseguir a los muchachos, vecinos y visitantes con sus varas y a más de uno asustar con sus máscaras. Antiguamente irrumpían en la procesión de San Sebastián realizando una escenificación de lucha ritual.

Llevan indumentaria militar, máscaras de madera, pañuelo negro a la cabeza, varas, varios cencerros atados en la cintura para producir ruido, al igual que los anteriores personajes, con una vestimenta que es muy característica. Hasta la imposición del nuevo servicio militar obligatorio a finales del XIX vestían harapos, pieles u otra indumentaria, pero luego adoptaron como atuendo los uniformes del ejército. 

El objetivo es atraer a un perfil de visitante basado en el turismo etnográfico y dando más razones al turismo para elegir Pedro Bernardo como destino de interior.

En esta ocasión de pudo disfrutar de un día agradable, con una buenísima temperatura que ha hecho posible que todos los cuchareros y visitantes hayan disfrutado de esta bonita tradición.

Además, desde Siempreviva se ha lanzando la idea de realizar rutas de máscaras por las localidades de Ávila y visitar los diferentes pueblos que estos días celebran los carnavales.

Pero de momento... «Machurrero, machurrero, macha el ajo en el mortero», «Cierren puertas y ventanas que llegan los Machurreros».