Nombre a nombre, paso a paso.El goteo de refuerzos en las últimas semanas es incesante en el Óbila Club de Basket, que sigue construyendo poco a poco su nuevo proyecto.Lo hace bajo una hoja de ruta clara, la que han decidido mano a mano José Antonio Sánchez y la directiva del Óbila Club de Basket presidida desde hace unas semanas por Carlos Hernández Guío. Ambos se estrenan en sus cargos en una campaña en la que el Ávila Auténtica Carrefour El Bulevar regresa a la Liga EBA tras sus 10 años en Plata y a la que quiere y debe regresar. «Sin prisa pero sin pausa» deja claro José Antonio Sánchez, cuya presencia en la categoría es dilatada.
Su proyecto empieza a tomar forma.El primero en llegar fue un ‘viejo’ conocido suyo, el base Álvaro Tébar, ex del Eurocolegio Casvi, la antigua casa de José AntonioSánchez. Tras el base llegaron Jaume Lobo Martorell, JuanCastro Lombos, Stefan Radosavljevic o Ánder Pérez Moreno. Y todos bajo un denominador común, su juventud.«Hemos querido formar un equipo con jugadores con los que pudiéramos crecer juntos en EBA, jugadores con hambre de una categoría superior pero que ese crecimiento fuera de la mano con el club». La apuesta desde el CUMCarlos Sastre es el de la posible continuidad de este equipo, de estos jugadores, incluso en liga superior. Bien es cierto que la etiqueta del Óbila como trampolín para los jugadores hacia una categoría superior existe, «pero me gustaría que ese salto lo pudiéramos hacerlo juntos, que sea el equipo el que saltara».
Aunque aún quedan piezas por llegar –posiblemente la última incorporación sea el americano– el Ávila Auténtica Carrefour El Bulevar 2019-2020 será un equipo «joven, que en ciertos momentos pueda pecar de inexperto, pero al tiempo vamos a contar con jugadores que ya conocen de alguna manera la Liga EBA».Jugadores con «buenas referencias» y que «tuvieron incidencia en sus equipos». Una propuesta que espera pueda «sorprender» a la afición en su puesta en escena.
Sabe José Antonio Sánchez de la «dificultad» de hacer un equipo totalmente nuevo. «Hacer un equipo para pelear por el ascenso es muy complicado, pero sí podemos conseguir un vestuario que tenga ese hambre de crecimiento, por querer jugar más arriba, quizás será el principal argumento a desarrollar».
Llegar de nuevo a LEBPlata no será sencillo. No sólo porque el sistema de competición lo complica al máximo, sino porque el club sigue teniendo los límites económicos –«estoy acostumbrado a trabajar con un presupuesto bajo»– con los que ya se trabajó años atrás. Sin embargo «no renunciamos a nada» y tiene claro que los jugadores que puedan ir llegando «nos pueden dar el toque con el que marcar la diferencia». Es cuestión de acertar en las elecciones.
La temporada es larga, pero defiende Sánchez que lo que tienen en la cabeza y en lo que están trabajando «nos hace ser optimistas». Optimista y satisfecho con lo que se está encontrando, «sólo puedo hablar bien de lo que me estoy encontrando» señala ante la labor que lleva desempeñando en el club desde su aterrizaje a finales del mes de julio. Desde entonces «con lo que me he encontrado es un club y una directiva con ganas y medios para poder hacer un buen equipo, he podido conocer que todos los jugadores que han estado aquí han sido bien tratados y eso es una buena carta de presentación para reclutar jugadores».