El Partido Popular critica la subida del IBI anunciada por el equipo de Gobierno del Ayuntamiento y pide que antes de tomar decisiones de este tipo, cargando la "presión fiscal en las familias" y después dando "migajas" se plantee una bajada de sueldos por parte de los cargos políticos y asesores en el Consistorio.

La portavoz del PP en el Ayuntamiento, Sonsoles Sánchez-Reyes, quiso comenzar dando un mensaje de "calma a la ciudadanía" y mostró su preocupación sobre que el alcalde no conociera la situación económica del Ayuntamiento antes de preparar su programa electoral y lo primero fuera, dijo, "asegurarse los sueldos". Aún así, ahora que conocen la situación, aseguró, "están a tiempo de bajarse el sueldo" dado que "tienen margen" y supondría un "gesto de buena voluntad" por parte del alcalde, concejales liberados y asesores y además ellos están dispuestos a aceptar una reducción de las asignaciones a los concejales no liberados. Votaríamos a favor, señaló Sánchez-Reyes, quien añadió que estarían dispuestos a negociar si el equipo de Gobierno reconsidera esa subida del IBI y bajan los sueldos.

Para el PP, lo último tendría que ser subir el IBI, criticando que se trata de un "impuesto progresivo, no proporcional" y es por ello que cree que tomar esa decisión es "no conocer la situación económica de la ciudad".

Además, la representante del PP criticó que la visión económica dado por el alcalde es "sesgada" y "mezcla conceptos" y aseguró que la deuda financiera es de 30 millones, diez menos que cuando comenzó la pasada legislatura, aseguró. Además afirmó que los últimos años ha habido remanente de Tesorería, por lo que tendrían que esforzarse "para que este año lo haya" también.

Por todo ello cree que lo que se está haciendo es una preparación para decir "que no van a poder cumplir sus promesas electorales" y para pasar "del catastrofismo al triunfalismo" como hicieron "con loas medievales".