«Este año el objetivo es personal, mejorar»

A.S.G.
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Dani Rincón revisa sus objetivos de cara a un 2020 en el que se veía con opciones de haber peleado por disputar el Roland Garros Júnior. «Ahora no podemos ponernos objetivos de resultados»

«Al final el reto es el mismo, mejorar cada año»

Ya está en Ávila. Tenía ganas de regresar a su casa Daniel Rincón. Demasiado tiempo fuera de casa, en las instalaciones de una Academia Nadal en la que, junto a sus compañeros, profesores y trabajadores, afrontó el confinamiento con la idea de seguir trabajando desde las instalaciones de Manacor. «Decidí quedarme allí» recuerda echando la vista atrás el joven tenista abulense. «Pensé que estando allí cerrados podríamos seguir entrenando». No fue posible. Aunque no tenían contacto con el exterior el estado de alarma no lo permitía. «Han sido meses de físico en la habitación». No faltaron los ‘pelotazos’ contra la pared. Como hiciera Paula Arias en el garaje, «en algunos momentos hacíamos toques contra la pared». Han sido semanas para buscar soluciones improvisadas.  

Semanas para adaptarse y asumir la realidad. «Era aceptar lo que había y con lo poco que podíamos hacer tratar de no perder la forma física» señala Dani Rincón ya de vuelta a los entrenamientos aunque con una semana por delante de descanso junto a sus padres.

Meses extraños los de antes y los de ahora. Porque el trabajo, los entrenamientos han vuelto aunque sin un horizonte claro y definido, sin los retos y los objetivos con los que  comenzaba el 2020. Aunque siempre con una visión en positivo. «Ahora que no hay competición estamos aprovechando para hacer mejoras» explica Dani.«Cuando compites lo haces para ganar. No te fijas en ciertos detalles. Ahora que no competimos estamos trabajando en todas esas cosas que durante los torneos no tienes tiempo para trabajar» señala el abulense en un periodo que en muchos deportes se está utilizando para mejorar la base técnica. Un regreso a las pistas paulatino. «Cuando empezamos una hora se hacía corta» reconoce un tenista que suele acumular cuatro horas diarias con la raqueta de la mano. «Hay que ir subiendo poco a poco para evitar las lesiones. Hemos estado casi dos meses parados».

No hay prisas ni necesidad de forzar con un calendario en este 2020 del que «a nivel internacional no se sabe nada». Al menos de los ITFJúniors. «Habrá torneos Future de los que quizás podamos jugar alguno». Pocos torneos, mucha demanda. «No sé si podré entrar» comenta el joven abulense. Toca esperar. «Esperamos que en septiembre u octubre podamos empezar a jugar».Hasta entonces toca mirar a los torneos nacionales. «Los iremos jugando en verano para ir cogiendo el ritmo de competición. Con lo poco que hay para jugar todo el mundo los querrá jugar. El nivel será muy interesante» se marca ya en su agenda un jugador que, como tantos otros deportistas, ha tenido que recomponer sus retos. Y los suyos este 2020 apuntaban al Roland Garros Junior. «Al principio fue un poco frustrante. Llevaba una racha buena, lo estaba haciendo bien en el circuito júnior, con un ranking bastante alto.  Estaba mirando entrar en Roland Garros. Nos quedaban 2 o 3 semanas de torneos y si lo hubiéramos hecho bien podríamos haberlo conseguido.  Tocó aceptarlo». Como toca aceptar que este 2020 los retos quedan suspendidos. «No se puede poner objetivos de resultados pero sí personales, subir el nivel. Ése es el objetivo principal».

El 2020 comenzó como terminó el 2019, ganando

Estaba en un buen momento Daniel Rincón cuando el COVID-19 llamó a las puertas de todos. El abulense se había instalado desde hacía tiempo en una dinámica ganadora que arrastraba desde un 2019 en el que no sólo fue el triunfo, tanto en el cuadro individual como en el dobles, de la Orange Bowl, la competición considerada como el Campeonato del Mundo de Tenis Sub’16, sino que había sido un curso en el que había logrado la medalla de bronce con la SelecciónEspañola Sub’16 en la Summer Cup, había jugado con la selección la Davis Júnior o había ganado su primer ITFJúnior en el Vila do Conde Junior Tennis Cup. Y como había acabado el 2019 había arrancado el 2020, en plena inercia ganadora, sumando en febrero el primer ITFdel 2020 con el triunfo en Oberhaching. Una inercia que frenó el COVID-19.