La pandemia obligó a que las clases del Programa Interuniversitario de la Experiencia que lleva la Universidad de Salamanca, con su sede en la capital abulense, fueran on line. Fue una experiencia enriquecedora, especialmente por lo que significó de acercamiento a las nuevas tecnologías, pero también supuso perder parte del espíritu de esta iniciativa, la socialización en personas mayores de 55 años que tienen inquietudes académicas y que, en muchos casos, se acercan por primera vez a la universidad.

Sin embargo, este año las clases han vuelto a ser presenciales y ya se respira un ambiente diferente en la Escuela de Educación y Turismo de la USAL en Ávila, que es donde realizan. Desde la Universidad de la Experiencia en Ávila, Carmen Vanesa Álvarez explica que este curso cuenta con unos 70 alumnos, 24 en primero, entre seis y siete en segundo y tercero y otros 34 diplomados. Es especialmente significativa la cifra de los nuevos alumnos porque es lo que sirve para dar continuidad a un programa que siempre tiene muy buena acogida. 

El programa de la experiencia se mantiene en Castilla y León gracias a la colaboración de las universidades, como sucede en la capital abulense con la USAL. Gracias a él, los mayores de 55 años se acercan a la universidad combinando enseñanzas científicas y de humanidades. Hay una serie de asignaturas obligatorias, que este año se recuperan, y también diferentes itinerarios que pueden seguir los alumnos para graduarse.

Ello se consigue con clases lunes y martes y con la esperanza de que a partir de enero pueda volver la asociación de esta particular universidad, aunque dependerá de la situación sanitaria.

En la jornada de este martes recibieron la visita de la directora académica del programa, Noelia Morales, que destacó la importancia de la transferencia del conocimiento y la divulgación más allá de los alumnos de grado. Estos son alumnos muy especiales, «motivados y con muchas ganas», que lo que quieren es aprender más que cualquier otra cosa y eso se percibe en cada una de las sesiones y también los propios profesores que están encantados con esta experiencia.