Los vecinos de Moraleja quieren sus fiestas religiosas

P.R.
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Los 47 habitantes que han estado confinados en el municipio durante la pandemia han decidido, en una consulta realizada por el ayuntamiento, que sólo se celebren este año los actos religiosos de San Roque, el patrón de la localidad

Los vecinos de Moraleja quieren sus fiestas religiosas

El ayuntamiento  de Moraleja de Matacabras, un pequeño pueblo morañego situado en las inmediaciones de Madrigal de las Altas Torres, ha preguntado a sus vecinos por su decisión de ver qué es lo que prefieren realizar con las fiestas de San Roque, que se celebrarán el próximo 16 de agosto. Para ello el consistorio preparó un cuestionario con tres preguntas, con otras tantas opciones celebrativas, indico Félix Álvarez de Alba, el alcalde de la localidad a este periódico. La consulta se realizó el pasado domingo.

 Por una parte se preguntaba a los vecinos que viven en el municipio los 365 días del año si querían que se celebraran las fiestas (respetando la normativa vigente), si no querían fiestas  y una tercera opción que también había pedido mucha gente en la que se formulaba la pregunta de que si los vecinos querían que se organizaron los actos religiosos, cumpliendo las normas de sanidad. Al final, la primera opción consiguió 11 votos; la segunda, un total de 9 (no querían fiestas), y la tercer, la más votada, con 23 votos, pedían que se celebraran los actos religiosas de las fiestas. También hubo un voto en blanco y tres nulos, que no habían marcado ninguna casilla y ponían «lo que decida el alcalde».

En total, en la consulta participaron los 47 vecinos que han estado este invierno confinados en el pueblo. La intención del ayuntamiento es que estos 47 vecinos sean los que decidan como van a ser las fiestas porque al fin y al cabo ellos son los que están viviendo en el municipio todo el año. Comentaba el regidor que  “durante estos meses que hemos estado confinados en nuestras casas durante las visitas que les he realizado estos meses para preguntarles como se encontraban y para llevarles medicinas y otras cosas que me pedían, también mostraban sus inquietudes por las fiestas porque después de estar tanto tiempo confinados, no querían que viniera alguien de fuera y complicara todo porque pudiera surgir algún problema». Las preguntas se repartieron el pasado domingo por la mañana a todos los vecinos por las casas y después se recogieron las contestaciones por cada una de las viviendas a mediodía, «sin que los vecinos tuvieran que salir de sus domicilios».

En principio el regidor dijo que la idea es que se celebre la misa, en lo que permita el aforo en ese momento. «Después habíamos pensado que para que la procesión la pudieran ver toda la gente que hay en el pueblo en esas fechas, que será mucha, lo que queríamos hacer es que recorriera las calles del pueblo para que pudieran ver la procesión las personas que no habían podido acudir a misa. En la procesión participaría la gente que haya estado en la misa yrecorrería las puertas de las casas del municipio. Se pedirá a la gente que no se mueva de las puertas de sus casas para no formar aglomeraciones».