Irpin. 5 de marzo de 2022. Yulia trata de localizar por teléfono a su marido, Oleg, al que ha perdido en medio del tumulto mientras escapaban de los bombardeos.Vlod, un militar sostiene a su hija, Emma, de cinco meses.

Bovary. 22 de marzo de 2022. Zina, de 62 años, da de comer a su marido, Vasyl, de 63, que ha logrado salvar su vida pero no su pierna derecha.

Y así decenas de historias captadas como nadie por el objetivo del fotoperiodista Luis de Vega y que hasta el próximo 2 de junio pueden contemplarse en la exposición 'Ucrania. La guerra de los civiles', en el Episcopio. El propio Luis de Vega, conectado de forma telemática desde Zaporiyia, era este viernes el encargado de presentar una exposición dura pero necesaria, que refleja, como decía el fotógrado del diario El País, la realidad de aquellos que antes de que estallara el conflicto eran profesores, conductores de autobús o amas de casa y que un día se vieron obligados a vivir inmersos en una guerra.

Los rostros de la guerra - Foto: David Castro«Desde el comienzo de la guerra he estado en Ucrania, cosa que considero un privilegio», comenzaba así sus palabras a través de la pantalla el onubense. «Las vidas que yo trato de reflejar son las de los civiles que se ven salpicados por un conflicto como el actual, que no podemos olvidar que se ha desatado por la invasión a Ucrania de un país vecino», aprovechaba para denunciar De Vega, que insistía en la necesidad de tener presente en todo momento que «aquí hay un agresor y un agredido».

«Ucrania es un país en el que todo habitante sufre la guerra», insistía De Vega, «y ésa es la idea que quiere reflejar esta exposición».

Organizada por la FundaciónAnastasio de Gracia, la muestra incluye muchas de las fotografías tomadas por De Vega en este tiempo. Algunas han sido publicadas en prensa. Otras no. Algo que, consideraba el autor de las mismas, les «otorga una segunda vida», permitiendo al espectador de las mismas plantearse preguntas «de forma más sosegada que en las redes sociales o la prensa diaria'.

«Es importante que las fotos lleven un pie de foto con información añadida, para comprender mejor que son personas», apuntaba De Vega, autor asimismo de los textos de las cartelas. Textos que presentan, como decíamos, a hombres y mujeres, niños y ancianos, envueltos sin quererlo en una locura que les ha arrebatado a seres queridos.

«Llevo ocho meses en Ucrania, desde el 24 de febrero que comenzó la guerra», compartía el reportero, que aunque reconocía que a esta muestra habría que añadir muchas imágenes, tenía claro que las que sí están expuestas reflejan «la esencia» de la guerra: vida, muerte, esperanza o incertidumbre fueron los términos que salieron de sus labios para describir un conflicto del que, confiesa, no puede atisbar su fecha de finalización. Pero sobre el que sí que se atreve a vaticinar algo: a su término, decía, vendrá la posguerra, «una etapa de incertidumbre para el país» en la que no se debería dejar de lado a Ucrania.

A la presentación de la muestra asistieron, entre otros, los responsables de la FundaciónAnastasio de Gracia y el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera.

La exposición 'Ucrania. La guerra de los civiles' puede visitarse hasta el 2 de junio en el Episcopio de manera gratuita. Su horario de martes a viernes es de 19,00 a 21,00 horas; los sábados y festivos abre además de 12,00 a 14,00 horas; y los domingos, sólo en horario de mañana.