El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, apeló este martes a la «responsabilidad» y a evitar perjuicios a la Comunidad Autónoma la decisión de retirarse como acusación particular en el proceso que sigue el Juzgado de lo Penal de Ávila contra una trama de cazadores furtivos de cabra hispánica, cuyo juicio comenzó la semana pasada.

Suárez-Quiñones respondió así en el pleno de las Cortes al procurador socialista por Ávila Miguel Hernández, quien calificó de «llamativo» la decisión de la Junta y de «ambiguedad» la posición cuando, por un lado, se apoya «la caza a ultranza», y, por otro, «no se persigue a los furtivos».

«A Dios rezando y con el mazo dando», sentenció el socialista, que criticó que se menosprecie el trabajo de la Guardia Civil y que este caso se haya quedado en un «gesto».

La intervención de Hernández motivó una dura réplica de Suárez-Quiñones, quien tildó de «osadía y falta de rigor y de información» los argumentos aportados y pidió que se formulen preguntas con «rigor» y no «juegos florales».

El consejero recordó que sólo la Junta de Castilla y León se personó como acusación particular en un proceso en el que fueron imputadas 29 personas, pero subrayó que ante la nulidad de la causa por el juzgado y la Audiencia de Ávila los técnicos de la Junta propusieron el pasado 21 de octubre retirase para no terminar en «posición temeraria».

«Las actuaciones han sido responsables, la Junta ha hecho lo que tenía que hacer, no había otra», argumentó finalmente el consejero de Fomento y Medio Ambiente.