La pandemia de la covid-19 se sigue notando en todos los ámbitos y el hospitalario no podría ser menos. En este caso se trata de la lista de espera quirúrgica y sus registros, según explicaron desde la Junta de Castilla y León, y ello a pesar de la recuperación de la actividad ordinaria experimentada este verano. En el caso de Ávila, los datos a finales de septiembre, ya que se dan a conocer trimestralmente, indican una subida de las personas que están a la espera de pasar por quirófano. En concreto, se pasó de 678 en el trimestre anterior, a 806, es decir, sube en 128 pacientes. Si se compara con lo sucedido un año atrás, aunque hacer comparaciones en una situación sanitaria como la actual hay que hacerlo con mucha prudencia, se ve que prácticamente es el mismo número, dado que entonces eran 818.

Sin embargo, se da la circunstancia que la demora media, es decir, lo que se espera para llegar a la mesa de operaciones, ha tenido un importante descenso de 20 días respecto a junio y ahora está en 69 días, 20 menos que entonces y teniendo en cuenta que en el trimestre anterior había habido cierre de quirófanos. Sin embargo esa cifra queda lejos de la de septiembre de 2019 cuando la demora media se situaba en 44 días.

Esto sucede en un momento, según explicó recientemente María Antonia Pedraza, gerente de Asistencia Sanitaria de Ávila, en el que se están recuperando las operaciones con los ocho quirófanos en funcionamiento  en horario de mañana y tarde.

Estos datos responden a la lista de espera estructural, por lo que en realidad hay más personas ‘esperando’ pero lo hacen en circunstancias especiales. La cifra se eleva hasta 997 si se tienen en cuenta los 106 pacientes a quienes de forma transitoria no se puede programar la operación y otros 85 que esperan tras haber rechazado un centro alternativo.

Los datos de la lista estructural también se ofrecen a través de la prioridad que tiene para las personas llegar a quirófano. De esta forma se situaron en nivel 1 (pacientes cuyo tratamiento quirúrgico, siendo programable, no admite una demora superior a 30 días) 51 casos y todos ellos se operaron antes de los 30 días. En nivel 2, cuando la situación clínica o social admite una demora relativa, siendo recomendable la intervención en un plazo inferior a 90 días, no se llegó a la totalidad en el plazo establecido pero sí en un 91 por ciento de los casos (201 de 221). Aún así es mejor que el 59,3 por ciento de media en Castilla y León. Y en el nivel tres, cuando se permite más demora porque no supone secuelas importantes, se indica un plazo de 180 días, que se cumplió en un 82 por ciento de las ocasiones en el caso de la sanidad abulense.

La demora media en estas prioridades fue de 12, 46 y 84 días, respectivamente.

En el análisis por especialidades, sigue siendo Traumatología donde más pacientes hay y además esperan más tiempo. El dato a cierre del tercer trimestre indicaba una lista de espera de 237 personas que esperaron una media de 132 días. 

En cuanto al resto, en Cirugía General y Digestivo había 87 personas y una espera de 28 días; en Dermatología, 163 personas y 44 días; en Ginecología, 38 personas y 43 días; en Oftalmología, 79 personas y 18 días; en Otorrinolaringología, 109 personas y 71 días, y en Urología, 93 personas y 40 días.