Naturávila acogió  este miércoles una jornada sobre producción ecológica desarrollada por el Consejo de Agricultura Ecológica de Castilla y León (Caecyl). Una jornada formativa para atender las demandas de información sobre producción ecológica que tienen tanto operadores como personas que quieren incorporarse a este tipo de agricultura que es «un modelo de producción que como base tiene la tradición y que se genera en base a los desmanes que la agricultura química genera» tanto de contaminación de suelos, aguas y aire como de pérdida de calidad de los alimentos. «El momento es de lo más idóneo porque ya las alarmas están puestas», afirmó Juan Senovilla, representante de Caecyl, poniendo como ejemplo la contaminación del nivel freático por nitratos que reflejan los mapas de la Junta de Castilla yLeón.  

Sobre el papel de Castilla y León en este tipo de cultivos, apuntó Senovilla que la nuestra es de las comunidades donde «menos se ha desarrollado la agricultura ecológica», con unas 50.000 hectáreas dedicadas a esta producción y unos 1.300 operadores. «En una comunidad eminentemente agrícola como Castilla yLeón tendría que haberse desarrollado más la agricultura ecológica», señaló Senovilla antes de explicar que quizás esto no ha sido así «por el clima continental que tenemos, muy parecido al de Centro Europa» y recordar que en las zonas «periféricas» es donde más se ha desarrollado este tipo de producción. «Es el momento de corregirlo y la apuesta de las instituciones tiene que ser la de la agricultura ecológica», defendió Senovilla.

En cuanto a Ávila, señaló el representante de Caecyl que el papel de la agricultura ecológica es «pequeño» y que esta producción «se ha ido desarrollando a base de impulsos» como también ha ocurrido en otros lugares como Palencia, Segovia y Soria.  

«La ganadería ecológica es la asignatura pendiente de este sistema de producción», apuntó por su parte, Ernesto Aparicio, director técnico de Caecyl,  para apuntar que se trata de «oportunidad» para los ganaderos.

Jesús Martín, diputado de Desarrollo Rural, destacó la apuesta de la Diputación Provincial «por la producción ecológica, que ha pasado de ser una moda a ser un hábito claro de consumo que crece exponencialmente». Habló Martín de «un nicho de mercado interesante para productores y para la industria transformadora alimentaria», apuntando que la producción ecológica puede generar empleo y riqueza y contribuir al reto demográfico. Recordó así mismo que en el conjunto nacional la producción ecológica ocupa «más de dos millones de hectáreas, siendo nuestro país el mayor productor de la Unión Europea y el quinto mundial», de ahí la importancia de que los productores tengan información sobre este tipo de cultivos y producciones.