Nervios y distancia en el primer día de instituto

M.E
-

Unos 7.900 alumnos de la ESOy el Bachillerato iniciaron este miércoles el nuevo curso escolar, marcado de nuevo por la covid aunque ya con muchos estudiantes vacunados

Nervios y distancia en el primer día de instituto

Algunos emocionados, otros nerviosos y alguno incluso algo asustado, pero todos con los ojos bien abiertos para no perderse nada de un momento especial, el primer día de instituto. La información con las listas de alumnos los cuatro grupos del primer curso de la ESO en el Isabel de Castilla marcó otro paso importante para saber si irán a clase con los amigos del colegio, el que los tuviera, porque alguno no dudaba en confesar que todavía no conocía a nadie.A continuación, tocó ponerse en la fila del patio para materializar la entrada en el aula según el protocolo covid, el mismo que el del año pasado. Una vez en la clase del que será su «segundo hogar» durante todo el curso, la directora del centro, Aida Márquez, acompañada por los jefes de estudios y los tutores, les dio la bienvenida a un centro en el que harán amigos, aprenderán mucho y al que seguro se adaptarán en unas semanas, en un mensaje que seguro les tranquilizó. 

Esta misma situación se vivió en un buen número de centros de la capital y la provincia este miércoles, el día fijado para el inicio de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y el Bachillerato. Unos 7.900 alumnos, aproximadamente un tercio de los matriculados en todos los niveles formativos este curso, empezaron este miércoles las clases, después de que el pasado viernes lo hubieran hecho los pequeños de Educación Infantil y los de Educación Primaria, además de las ramas de la transición para la vida adulta. 

La pandemia de la COVID-19 sigue marcando este periodo escolar, pero la buena experiencia del curso pasado y el hecho de que los profesores y la mayoría de alumnos de Secundaria y Bachillerato (los mayores de 12 años) ya están vacunados dan algo más de tranquilidad a los equipos directivos y docentes y también a los padres de los estudiantes. Algunos de ellos, por cierto, observaban de lejos la primera entrada de sus hijos en el instituto, aunque seguro que los de los siguientes cursos (la entrada fue escalonada durante toda la mañana) ya estaban más acostumbrados y no estuvieron tan pendientes de ese estreno. 

La directora del Isabel de Castilla afronta el inicio del curso «a la expectativa» y pensando que «irá mucho mejor», al considerar que las medidas van a ser «las suficientes para evitar contagios dentro del centro y poder seguir funcionando con normalidad, excepto en el caso de cuarentenas por contagios estrechos». Las ratios de alumnos se mantienen «bajas» porque se continúa con el metro y medio de distancia entre cada alumno, recordó Aida Márquez, hoy en día «la prioridad» del centro.

El jefe de estudios, Eduardo Lanuza, explicó que tras la incertidumbre del año pasado había ganas entre el profesorado para poder volver cuanto antes a la normalidad ya que, aunque todavía hay «limitaciones» en materias como la educación física, también hay «algunos cambios» que permiten, por ejemplo, la vuelta de las actividades extraescolares, eso sí, manteniendo también el protocolo. 

Respecto a los objetivos académicos, explicó que se mantiene el interés general de reducir las tasas de fracaso escolar y absentismo, si bien «nosotros estamos aquí para nuestros alumnos, para darle la mejor formación posible», añadió.