«No es el mejor acuerdo, pero viene derivado del maquillaje financiero que ha hecho el Partido Popular en estos años» en el Ayuntamiento de la ciudad. El portavoz de Ciudadanos, Carlos López Vázquez, justifica su acuerdo con Por Ávila para sacar adelante su proyecto de ordenanzas fiscales en la herencia recibida del PP en materia económica, una «chapuza» que, afirma, ha dejado un «problema financiero» ante el que no ha quedado más remedio que aceptar la subida de impuestos. «Lo mejor habría sido no subir el IBI pero por responsabilidad política, teniendo en cuenta el estado en que están las cuentas, hemos accedido con la exigencia de que fuera la mínima subida posible para solventar el problema», explicó.

Carlos López detalló que hubo que sentarse con el equipo de gobierno, «ver las cuentas y hacer muchos números» y que, en una negociación «dura», se ajustó «al máximo» una medida que, precisó, «no nos gusta». 

El portavoz de Ciudadanos señaló que, a cambio, se pidió el «compromiso de que se haga una mejor gestión de los recursos y se adelgace la administración», al tiempo que se permita un «pago flexible» del IBI a empresas y vecinos, según la situación económica. A esto se unen «las ayudas y bonificaciones que hemos introducido para el IBI y para otras tasas» para parados de larga duración, víctimas de violencia machista y familias numerosas y monoparentales. Como ejemplo, citó que el incremento del IBI para una familia numerosa se quedará finalmente en el 3,6%, al contar con la exención del 5% sobre la subida general del 8,6% en ese impuesto.

Sobre la herencia recibida por el PP, Carlos López subrayó que «en el apartado de ingresos venían 2 millones de euros de parcelas que no han vendido», mientras que existen compromisos con «el Edusi, el ARU y las piscinas que hay que pagar» o la deuda con la CHD, que «lleva sin abonarse desde 2017». «Una empresa privada no habría podido aguantar la gestión que se ha hecho estos años» marcada por «el derroche constante», añadió el portavoz naranja.