Hay cosas que no son de risa y, sin duda, el aprendizaje, sobre todo cuando es de un hijo con necesidades especiales, es una de ellas. Precisamente la educación especial y el posible cierre de sus centros en favor de una escuela inclusiva ha estado en el centro del debate en las últimas semanas, siendo muchas las voces que se han levantado pidiendo que se mantenga la educación especial.

Y entre esas voces se pudo escuchar recientemente la de un abulense, el Mago More, que publicó un vídeo en defensa de la educación especial frente a quienes defienden la escolarización en escuelas ordinarias, poniendo de referente su propia situación, la de su hijo con discapacidad intelectual. 

En este vídeo, que se puede ver a través de las redes sociales, el mago y humoristas aboga por ser «realistas», porque él también defiende «la paz en el mundo y que se acabe la pobreza infantil», pero hay que saber cuando es una utopía. 

Deja claro que está a favor de la integración en escuelas ordinarias si el niño se beneficia de ello, pero también manteniendo la educación especial para los casos que así lo precisen. «Porque si hay alguien que necesita un pulmón, no lo podemos hacer un transplante de corazón», asegura en el vídeo.

Para dejar clara su posición pone como ejemplo la historia de su hijo, que dada su discapacidad cree que en un colegio ‘normal’ lo que pueden hacer con él es «ponerlo en un rincón como si fuera una estantería». También está la historia de otro chico, que cuando iba a un colegio ordinario llegaba a casa llorando pero en el centro especial que atiende a niños con parálisis cerebral asegura estar muy contento. No para de reír, dice él mismo.

Esa es la historia de Gonzalo, pero también está la de Pedro, que solo se comunica con los ojos y en el colegio de educación especial ha conseguido contarle al mundo todo lo que pensaba, entre esas cosas, que es del Atlético de Madrid. Por eso se el autor de este vídeo pregunta si pretenden retroceder 50 años en el tiempo porque en los colegios especiales se cuenta con fisioterapeutas, logopedas, gente que ayuda a que los chicos puedan alcanzar su máximo potencial, afirma.

Critica la posición del Cermi (Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad) y en concreto su denuncia ante la ONU sobre que en España había segregación dado que algunos niños se les obligaba a ir a colegios especiales, lo que hizo, afirma, que tras del paso de los expertos, a quienes asegura se mostró «una visión sesgada de la realidad», presentaron un informe desfavorable y es a quien han escuchado los políticos y lleva a esa posible desaparición de la educación especial.

 Y en esta situación él no se siente representado por el Cermi en cuanto a las personas con discapacidad intelectual. Es más, cree que les silencian e ignoran por lo que pide a los políticos que hagan una reflexión porque no van a parar para que haya una educación especial para sus hijos. Para el suyo.