La FAMPA valora la vuelta al colegio de forma presencial

M.E
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Su presidente remarca que los centros son seguros y que «los niños han dado una lección» y esgrime otros puntos a favor de la presidencialidad, como la calidad educativa, la salud emocional, la conciliación y la brecha digital

Alumnos con "ganas" y padres "más tranquilos" - Foto: Isabel García

La Federación Abulense de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Ávila valora la decisión de mantener la presencialidad en la vuelta al colegio prevista para el próximo lunes, 10 de enero, pese a la situación creada por el impacto de la sexta ola de la COVID-19 durante el periodo navideño, con los contagios disparados en prácticamente toda España y el debate abierto en torno a la conveniencia de retrasar o no el regreso a las aulas. Una vez que la Conferencia intersectorial de Sanidad, Educación y Universidades acordara hace unos días la presencialidad en los centros educativos y el mantenimiento del protocolo vigente hasta el momento, con algún ligero matiz, la FAMPA aplaude la decisión, en la que confiaban aunque hubo dudas, en aras al mantenimiento de la calidad educativa, la conciliación laboral y familiar y de la salud socioemocional de los escolares. 

El nuevo presidente de la FAMPA, Daniel Rincón, cita así varios aspectos a favor de la presencialidad en las clases, entre ellos que los centros han demostrado su seguridad a lo largo de este tiempo de pandemia gracias al esfuerzo de profesorado, alumnado y familias. «En los centros no se han reducido las medidas» y, de hecho, «los niños han dado una lección a los adultos porque en general siguen cumpliendo las normas», subraya Rincón, quien también cuestiona la posibilidad de que se hubieran cerrado los colegios cuando «no se han tomado ninguna medida en otros ámbitos, más allá de la obligatoriedad de la mascarilla en todo momento en exteriores, cuando igual sí que se tendrían que haber adoptado», indicó. 

La brecha digital es otro de los argumentos, no en vano la semipresencialidad o los confinamientos volverían a incidir en una «doble velocidad en la educación». A su juicio, con la pandemia se ha demostrado que «no todos los alumnos y las familias tienen los mismos recursos o facilidades» para seguir las clases on line, de ahí la importancia de la presencialidad para que todos los escolares tengan las mismas oportunidades.

El problema socioemocional en los menores, el cual es «cada vez más significativo» como consecuencia de la pandemia, es otro de los motivos esgrimidos por la FAMPA, al considerar que encerrarles de nuevo casa podría «agravar» esta situación en muchos casos. 

Además, «la conciliación familiar y laborar sería literalmente imposible» sin una vuelta presencial, subraya Daniel Rincón, quien también apunta que muchos de los menores «están alcanzando niveles de dependencia de las redes sociales y dispositivos digitales preocupantes» y que «el cierre de las aulas volvería a limitar su ocio e interacciones, reforzándose dicho uso». Precisamente, la Comisión de Salud Pública ha acordado este viernes recomendar cuarentena para todo un aula siempre que se den al menos 5 casos de covid, o estén afectados al menos el 20% de los alumnos, en un periodo igual o inferior a 7 días.