Aunque el factor humano tiene una participación fundamental en los accidentes de tráfico, el estado de las carreteras también juega su papel en la seguridad vial. El último informe de Automovilistas Europeos Asociados (AEA), que analiza la peligrosidad de la Red de Carreteras del Estado en el quinquenio 2015-2019 a partir de los últimos datos disponibles del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, sitúa a tres tramos de vías abulenses entre los más peligrosos de las Red de Carreteras del Estado, aunque, todo hay que decirlo, están ubicados lejos de los primeros puestos del ranking.

Así, AEA ha identificado 500 kilómetros de carreteras convencionales y autovías localizados en 82 vías de 44 provincias españolas cuyo Índice de Peligrosidad Medio (IPM) ha sido, como mínimo, diez veces superior al de la media nacional (9,5) al contabilizarse en ellos 1.685 accidentes y 2.523 víctimas.

Los tres tramos de carreteras abulenses que superan un IPM de 100, todas ellas convencionales, son el punto kilométrico 55 de la N-502, en el inicio de la bajada del Puerto de El Pico hacia el Tiétar, el punto kilométrico 21 de esa misma carretera, que corresponde el cruce en Solosancho, y el kilómetro 328 de la N-110, a la altura aproximada de Santa María de los Caballeros, antes de llegar a El Barco de Ávila. Entre los tres suman siete víctimas (heridos o fallecidos) y seis accidentes en los que al menos se registró un herido o un fallecido.

En concreto, el tramo del km. 55 de la N-502 se sitúa en el puesto 332 del ranking con un Índice de Peligrosidad Medio (IPM) de 153,6, al registrar 3 víctimas (heridos o fallecidos) y 3 accidentes con víctimas en el periodo analizado. La Intensidad Media Diaria (IMD) de ese tramo se cifra en 1.772 vehículos.

En el puesto 353 aparece el pk. 21 de la misma carretera N-502, un tramo con una IMD superior (2.015 vehículos) y en el que se registran dos accidentes que implicaron heridos o fallecidos y tres víctimas. El Índice de Peligrosidad Medio resultante de esos datos es de 143.

El punto kilométrico 328 de la N-110 cierra el ranking provincial con un IPM de 142 y el puesto 358 en la clasificación de los puntos más peligrosos de todo el país, fruto de un accidente y una víctima y con una IMD de 1926.

En Castilla y León el tramo con mayor peligrosidad se sitúa en la N-122 en la provincia de Zamora, al registrar un índice de peligrosidad de 2165,8 y situarse en el sector lugar en el ranking. En el país el tramo más peligroso se localizó en el km. 245 de la N-2, en Zaragoza, con un índice de peligrosidad que supera en 686 veces la media nacional, al elevarse a 6.523. 

El informe de AEA destaca que en el quinquenio analizado (2015-2019) el IPM de la Red de Carreteras del Estado –que es el indicador que se entiende más fiable para medir la peligrosidad de las vías– ha disminuido un 3 por ciento respecto del quinquenio anterior (9,5 frente a 9,8). Sin embargo, se han detectado más tramos que superan en más de diez veces ese índice, pasando de 180 a 500.

En esa selección, AEA ha tenido en cuenta los tramos de un kilómetro de carreteras de la red con un Índice de Peligrosidad Medio en los últimos cinco años igual o superior a 100.