La Mesa del Ferrocarril de Ávila ha dado un plazo de diez días al Ministerio de Transportes para que atienda a su petición de reunirse para abordar que se revierta la situación ferroviaria a los servicios que había antes de decretarse el estado de alarma el 14 de marzo o en el caso contrario pondrán en marcha distintas medidas y “no descartamos llevar a cabo cualquier tipo de acción”, incluidas movilizaciones sociales.

Después de reunirse el pasado jueves, en la tarde de este miércoles volvía a convocarse a los integrantes de la Mesa del Ferrocarril de Ávila, en una reunión que contó con la presencia del presidente de la Diputación Provincial, Carlos García, el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, y representantes de las distintas plataformas sociales, asociaciones y de la Junta de Castilla y León que la conforman, para mostrar su “indignación” por los servicios que han entrado en vigor el pasado lunes, una vez alcanzada la “nueva normalidad”, y que supone una reducción próxima al 50 por ciento en las frecuencias de comunicación de Ávila con Madrid respecto a los que había el 14 de marzo.

El presidente de la Diputación precisó que “hace apenas 72 horas amanecíamos viendo cómo el Ministerio de Transporte recortaba cerca del 50 por ciento de las líneas de ferrocarril dentro de la obligatoriedad de servicio público que unen Ávila con Madrid y viceversa”. Carlos García precisó que antes del 14 de marzo “teníamos 18 frecuencias” entre Ávila y Madrid y viceversa y “desde este lunes tenemos diez”.

Con esta situación, Carlos García afirmó que “entendemos que no se cubre el cien por cien de todas aquellas frecuencias que con anterioridad a la pandemia se venían prestando, y lo que más nos llama la atención en el documento que se nos envía por parte de Renfe es que se atenderá a la demanda”. En este sentido, recalcó que todos los miembros de la Mesa del Ferrocarril “entendemos que dentro de la obligatoriedad de dar esos servicios no existe ninguna demanda cuando vemos que se han suprimido bastantes líneas y en este caso dos principalmente que llevaban un gran número de usuarios, como la de las 5,55 horas y las 6,55 horas”. Además, añadió que “no tiene mucho sentido que durante la mañana podamos tener intervalos de cuatro horas y media sin ningún tren y en un intervalo de 24 minutos, a las 13,15 horas y a las 13,40 horas, haya dos servicios”. Lo cual, a su juicio, “empeora sustancialmente las condiciones que había antes”.

Carlos García insistió en que “no vamos a renunciar a tomar ningún tipo de acción para recuperar lo que entendemos que son servicios elementales para los abulenses, y vamos a exigir los próximos diez días que por parte del Ministerio se reciba a esta mesa no solamente para que se ponga en funcionamiento lo antes posible el cien por cien de las frecuencias que venían dándose antes sino también para que se escuchen y se pongan sobre la mesa aquellos planteamientos y acuerdos a los cuales habíamos llegado de manera unánime en la reunión del 25 de febrero” con el Ministerio.

Y recalcó que “vamos a poner sobre la mesa todas las iniciativas y acciones para recuperar cuanto antes los derechos en materia ferroviaria de esta provincia”. De esta forma, aseguró que no descartan el llevar a cabo movilizaciones. Por eso plantean un plazo de diez días para que se les reciba y el Ministerio de Transporte explique “qué posicionamiento tiene y qué entiende por la obligatoriedad de servicio público, porque si había 18 frecuencias y según ellos se sigue prestando el servicio con ocho frecuencias menos, creo que se están vulnerando los derechos de los abulenses en materia ferroviaria”.

Carlos García precisó que tras la reunión del pasado jueves, en la mañana del sábado se les dieron a conocer los nuevos horarios que entrarían en vigor el lunes, y desde ese momento se activó esta reunión para desde las instituciones y las administraciones “velar por los intereses de los abulenses”. A su vez, indicó que en los próximos plenos de Diputación y del Ayuntamiento de Ávila se impulsarán sendas declaraciones institucionales para ratificarlas y llevarlas de manera presencia a la Subdelegación del Gobierno.

Además, Carlos García sostuvo que “entendemos que hay ciertas cosas que son derechos y servicios fundamentales, y la sociedad abulense no puede conformarse con una prestación de servicios que redunda negativamente en el 50% de los servicios que tenía anteriormente a la crisis”, y al mismo tiempo quieren conocer qué avances ha habido en el Ministerio de Transportes respecto a las cuestiones que se abordaron en la reunión del pasado mes de febrero, “con infraestructuras que afectan a la seguridad vial en el caso de Navalperal de Pinares, la venta presencial de ciertas estaciones, tenemos ciertos pasos a nivel, tenemos una reivindicación histórica que es la mejora del material respecto a los trenes de Valladolid, tenemos otra reivindicación que entendemos que es de derecho, que es la mejora de los tiempos de viaje a Madrid, queremos conocer el planteamiento que tiene el Ministerio sobre estos asuntos que hace cuatro meses se pusieron sobre la mesa”, y sobre los que no tienen noticias. El presidente de la Diputación añadió que “entendemos que han sido unos meses difíciles, pero al igual que ha habido otras instituciones, tanto el Ayuntamiento como la Diputación como la Junta, que hemos venido trabajando en otros planes, entiendo que el Ministerio de Transportes también ha venido trabajando en estos planes”.

Por su parte, el alcalde de Ávila, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, manifestó que “es inadmisible lo que está ocurriendo con el ferrocarril de la provincia de Ávila”, y apostilló que “año tras año, día tras día vamos dando pasos atrás”. Según Sánchez Cabrera, “los distintos ministerios nos dan muy buenas palabras, y en la reunión del mes de febrero mostraron muy buenas intenciones, vinimos muy esperanzados y sin embargo nos hemos encontrado este lunes con un batacazo perdiendo un 50 por ciento de los trenes que teníamos con anterioridad”.

En este sentido, aseguró que las “instituciones, a través de la Mesa del Ferrocarril, vamos a estar reivindicando lo que es nuestro, lo que es justo y de justicia para los abulenses, y estamos hablando de un ferrocarril que no es el que nos gustaría, porque los tiempos de frecuencia son malísimos, los tiempos de viaje también son muy malos y por lo tanto lo que debemos hacer es mejorar, no ir hacia atrás”. Por eso, abogó por la “unidad” en la Mesa del Ferrocarril, y recalcó que “tomaremos todas las medidas que sean necesarias, incluidas las movilizaciones porque vamos a reivindicar lo que merecen los abulenses, que es un ferrocarril de calidad como lo tienen otras provincias de España”.

Por su parte, el portavoz de la Plataforma Social en Defensa del Ferrocarril de Ávila, Ricardo del Val, afirmó que “no podemos consentir que se reduzcan los servicios ferroviarios de la manera que Renfe lo ha hecho hasta el momento y la contestación que nos han dado a la petición que hicimos la semana pasada no se ajusta nada en absoluto” a la situación que había antes del estado de alarma, “y hablan de una manera vaga de que en función de la demanda así lo pida, pero no hay ningún estudio de demanda; es una contestación por los cerros de Úbeda para quitarse de encima el problema” y eso “no lo vamos a consentir de ninguna de las maneras”, afirmó.

Ricardo del Val aseguró que recuperar los servicios que había antes del 14 de marzo “no es una cuestión de justicia, es de pura lógica, porque si el día 14 la movilidad en el Estado español era completa para toda la ciudadanía, estamos ahora en la misma situación una vez derogado el estado de alarma, la movilidad es libre por todo el estado y los servicios públicos tienen que ser los mismos”.

Por último, Juana Robledo, portavoz de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril de Pinares, expresó que es “inadmisible la razón que se nos da para seguir con esta reducción del 50% de trenes que tenemos, y que se irán aumentando a medida que lo haga la demanda, porque en nuestra provincia muchos viajeros que utilizan el ferrocarril son viajeros recurrentes, que lo utilizan para ir a trabajar, que la vuelta a esta normalidad ha conllevado que se tengan que desplazar, y si no tienen tren para moverse pues utilizarán coches o autobuses, con lo cual nunca se va a poder contabilizar esa demanda”.