Los jardines de entrada del Castillo de Valdecorneja de El Barco de Ávila es el escenario escogido para conmemorar este lunes un Día de Todos los Santos muy especial, puesto que se ha programado un acto institucional desde el Ayuntamiento del municipio para recordar a las personas fallecidas durante la pandemia.

El alcalde Víctor Morugij ha significado que, lamentablemente, el coronavirus «se ha apoderado del calendario y de nuestros costumbres», lo que motiva que la tradición en torno a la festividad del 1 de noviembre sea «más complicada que años anteriores» porque «faltan muchos y no hay que olvidarlos”, de ahí que el mejor homenaje para ellos sea “mantener su recuerdo y agradecer el tener la fortuna de celebrar un año más”.

Según ha dicho, son jornadas para recordar a nuestros difuntos “pero también, y más que nunca, es un día para celebrar la vida” y agradecer el esfuerzo de todos aquellos que están trabajando para cuidar a la sociedad y frenar los contagios: sanitarios, transportistas, personal de limpieza, cuerpos de seguridad… “porque lo más importante es tenernos los unos a los otros y ser responsables para que todo acabe cuanto antes desde la unidad”.

Al acto, organizado el lunes 2 de  noviembre a las 12:00 horas, está prevista la asistencia de las autoridades locales y de algunos familiares, que tomarán la palabra antes de que los padres de Óscar, el fallecido más joven en El Barco de Ávila durante la pandemia, depositarán una corona de laurel en los jardines de entrada del Castillo de Valdecorneja.

El emotivo acto concluirá con un momento de reflexión de  los presentes con el fondo de canto de la barcense Silvia Hernández, q interpretará el célebre Lascia ch’io pianga de Händel.