Fernando Lussón

COLABORACIÓN

Fernando Lussón

Periodista


Las incógnitas de la España Vaciada

12/01/2022

Dice Javier Cercas, en su libro 'Independencia', que negar la existencia de la derecha y la izquierda es como negar la existencia del norte y el sur. Las listas de la España Vaciada que se van a presentar en cinco provincias –Burgos, Palencia, Salamanca, Soria y Valladolid- huyen de esa dicotomía porque tratan de captar votantes en todo el espectro político, que les permita tener procuradores en las Cortes de Castilla y León tras las elecciones autonómicas del 13-F.  

 Sería lógico pensar que el partido más perjudicado por estas candidaturas fuera el Popular dado que es el que ha gobernado la comunidad autónoma desde que dimitiera Demetrio Madrid, y por tanto lleva más de tres décadas en el Gobierno sin que se hayan resuelto los problemas que acucian al mundo rural y despoblado que defienden estas plataformas. En esa circunstancia se ha fijado el PSOE para no convertir a esas formaciones en el principal objeto de su batalla política, aunque es muy difícil que los escaños que consigan puedan provocar un vuelco que deje sin el Gobierno no al partido más votado que según todas las encuestas será el del actual presidente Alfonso Fernández Mañueco.  De ahí que la principal crítica del PP hacia esos nuevos actores políticos sea la de considerarlos como 'marcas blancas' del PSOE, y aunque ambos partidos recelan de esos proyectos localistas o cantonalistas, los dirigentes populares son los que más temen una huida de votos hacia esas formaciones que denuncian el desamparo de sus provincias, aunque sus reivindicaciones están muy lejos de poderse considerar como identitarias como ocurre en el caso de los partidos nacionalistas asentados.   

No obstante, por muy novatos que sean algunos de los líderes de las plataformas, que no han tenido una participación activa en muchos de los casos, no son tan inocentes como para no saber que es al lado del poder donde se consiguen las reivindicaciones de sus territorios. Y sobre todo les acucian las prisas por mejorar la situación de un medio que se despuebla, en el que no se cumple el principio de igualdad en el acceso a los servicios públicos o que pueden acabar convertidos en un solar en el que se instalen las macrogranjas que demuestran no solo el ministro de Consumo, Alberto Garzón, sino los ganaderos de extensivo. Como es el caso de Palencia, donde una comarca se opone al proyecto de instalación de trece de ellas que albergarían 80.000 cerdos y que pueden ser la puntilla para el turismo rural, que es uno de los recursos al que se aferran los habitantes de la zona para sobrevivir.  

La convocatoria adelantada de las elecciones ha impedido que el proyecto de España Vaciada se consolide, pudiera aglutinarse y extenderse por las cuatro provincias en las que no presentará candidaturas y, por ahora, es una incógnita los procuradores con los que podrá contar, porque las encuestas previas a la formalización de las candidaturas no recogían el impacto de su presencia ante las urnas y si lograrán su objetivo de poder constituir un grupo parlamentario propio. La posibilidad de conseguir escaños en todas las circunscripciones por las que se presentan es difícil dado los condicionamientos demográficos de cada provincia.