Domingo del Prado

Los lunes de Domingo

Domingo del Prado


Romance de 'Los cuatro Pablos'

01/02/2021

Hoy voy a escribir en serio,
y no voy a hacer el ganso, 
porque para hacer tal cosa, 
ya tenemos a estos cuatro:
el Jansél, el  Eche Nike,
el  gran Turrión y el Cansado.
Hace muy escasos días,
en todos los Telediarios
sorprendiéronnos a todos
gravísimos altercados:
¡en Madrid y en Barcelona
mú gorda se estaba armando!
Resulta que a un buen rapero,
—y aquí sale el primer Pablo—,
sin grave causa y motivo,
al pobre lo han condenado
por cantar unas coplillas
ingenuas, de chicha y nabo.
Como enchironan en Lleida
al pobrecito muchacho,
pónense pronto de acuerdo
varios millares de vándalos,
y escomencipian protestas,
incendios, golpes y atracos
que rompen escaparates,
y derriten los semáforos,
destruyen tó lo que pillan,
lanzan piedras, quiebran bancos,
y disparan adoquines
los adoquines citados.
Aparecen por doquier,
contenedores quemados,
aunque más quemado yo
estoy por lo que ha pasado:
¡qué vergüenza, qué bochorno!
¡qué repugnancia, qué asco!
Mas ¿porqué a este buen chaval,
siendo más bueno que un santo, 
por soltar unos piropos
a la sombra lo han mandado?
¿Tienen, acaso, malicia,
sus tuíteres y sus cánticos,
a más de otras «alabanzas»
que aquí no vienen al caso?

Aclarome, de repente,
la duda el segundo Pablo
en un flamígero twittter
que a las nubes ha lanzado:
El que apellida El Ché Nike
defiende los altercados,
y azuza, hostiga y anima 
a que sigan apedreando
a los Polis y a los Mossos,
que eso está justificado,
pues debe haber libertad
en este ruinoso Estado.
Que, según dijo «su Jefe»,
—y aquí salta el tercer Pablo—
«No ha aprobado este país
el examen democrático».
Lo dijo en Rusia, y se queda
cerca del Putin, tan pancho…
El mesmo que antes dijera
que el Pisdelmónt, ¡pobre Carlos!
está en el «exilio» en Bélgica,
pasando sed, y ayunando,
igual que los que se fueron
cuando la guerra del Paco.

Total, que don Eche Nike
da la razón a los bárbaros
y, al instante, en el Congreso
no vean la que se ha montado.
En la mitad del combate, 
vuelve a hablar el tercer Pablo:
— «Yo no sé qué criticáis,
pues mi Ché Nike es mú majo,
y lo habéis puesto a parir
por un triste comentario
que puso el probe en las redes,
cuando él estaba enredando.
Seguirá dando la murga
mientras UNIDAS PODAMOS.»
Consultado el Presidente 
sobre tal desaguisado,
parió al final, y bien dijo,
o, al menos, quise escucharlo:
—¡Estoy hasta las narices
y hasta otro sitio más guarro,
igual que el grande Mar Laska,
la mí Calvo y el mí Ávalos!

En la mitad del fragor
interviene el cuarto Pablo,
el que hace de oposición
y se apellida Cansado.
Pide que siga en la cárcel
el rapero tan osado,
y la dimisión ya mismo
de los otros dos tocayos.
Mas quédanse con las ganas
y a dos velas Pablo El Cuarto,
y doña Inés Arrimada
y el santo de Vox, San Tiago.
Mientras Cansado, en primicia,
lanza a teles, prensa y radios:
—Perdonad, que yo me mudo
y estoy en pleno traslado,
pues dejo Génova Trece…
¡Así al PePe llega el cambio!
Y allí siguen, como siempre,
liados Los cuatro Pablos,
lanzándose unos a otros
a la cabeza los trastos…
Si Pedro no lo remedia,
seguiremos aguantándolos
por lo menos, Dios nos libre,
hasta el 2.024.

¡Cuídense mucho, lectores,
que este virus es muy malo!